Un teniente del ejército estadounidense le apuntó con armas de fuego, le rociaron con gas pimienta y luego lo esposaron unos agentes de policía que lo detuvieron a un lado de la carretera por una “placa que faltaba”.
Por Metro
El subteniente Caron Nazario, quien es negro y latino, dice que sus derechos fueron violados cuando dos policías lo detuvieron a un costado de la carretera en Windsor, Virginia, y usaron ‘fuerza excesiva’ durante un interrogatorio.
Eso es según una demanda presentada por Nazario contra los oficiales, Joe Gutiérrez y Daniel Crocker, en la que busca una compensación de 1 millón e dólares luego de la parada de tráfico de diciembre de 2020.
Las imágenes tomadas de las cámaras corporales de los oficiales muestran cómo Nazario, vestido de uniforme con las manos en el aire, es amenazado y rociado con gas pimienta varias veces por los dos agentes de la policía del estado de Virginia, uno de los cuales utilizó un término de la jerga para sugerir que estaba frente a la ejecución según el traje.
El clip también muestra a Nazario siendo derribado al suelo antes de ser detenido, y su demanda afirma que la policía usó “fuerza excesiva, encarcelamiento falso y confiscación ilegal” durante el enfrentamiento.
Crocker y Gutiérrez, quien desde entonces fue despedido mientras su colega sigue empleado, detuvieron a Nazario en una gasolinera en Windsor alrededor de las 6.30 pm del 5 de diciembre.
El encuentro fue capturado por al menos tres cámaras, incluidas las cámaras corporales de ambos oficiales y el teléfono de Nazario. Muestra a la víctima sentada con las manos en el aire en su flamante Chevrolet Tahoe.
El vehículo era lo suficientemente nuevo como para que Nazario no tuviera placas permanentes y tenía ‘placas temporales de cartón’ pegadas en el interior de la ventana trasera, dice la demanda.
Según los informes policiales proporcionados con la demanda, Crocker encendió las luces y las sirenas de su vehículo de patrulla para iniciar una parada de tráfico para un SUV negro “con cristales tintados oscuros” y sin matrícula.
La demanda afirma que la placa de matrícula es visible en los clips de la cámara del cuerpo en tres momentos distintos. En su informe policial, Crocker reconoció haber visto la placa más tarde en el enfrentamiento.
El abogado de Nazario, Jonathan Arthur, comentó que su cliente le explicó que no estaba tratando de eludir a Crocker, sino que estaba tratando de detenerse en un área bien iluminada “por la seguridad de los oficiales y por respeto a los oficiales”.
Gutiérrez estaba conduciendo cuando escuchó la llamada de radio de Crocker y lo vio intentar detener la camioneta, que fue cuando decidió unirse a la parada.
La demanda dice que cuando los dos oficiales llegaron a la camioneta de Nazario, la placa de matrícula era visible en la parte trasera.
La evidencia de video muestra cómo Nazario les dice a los oficiales armados que tiene ‘honestamente miedo de salir’ de su SUV, mientras Crocker y Gutiérrez le apuntan con sus armas durante la parada de tráfico.
“¡Sí, deberías estarlo!”, Responde un oficial durante la parada.
Los oficiales intentaron sacar a Nazario de su vehículo mientras él seguía manteniendo las manos en el aire.
Fue entonces cuando Gutiérrez roció a Nazario con gas pimienta varias veces.
En los clips, Nazario dijo: “Ni siquiera quiero alcanzar mi cinturón de seguridad, ¿puede por favor …? Tengo las manos extendidas, ¿podría, por favor? Mira, esto está realmente desordenado”.
Los agentes le gritaron órdenes contradictorias, diciéndole que sacara las manos por la ventana mientras le decían que abriera la puerta y saliera, dice la demanda.
En un momento, Gutiérrez le le explica a Nazario que se estaba “arreglando para montar el rayo”, una referencia al uso de la silla eléctrica para las ejecuciones y una frase utilizada en The Green Mile, una película sobre un hombre negro que enfrenta la pena de muerte.
La demanda dice que Nazario se bajó del vehículo y pidió un supervisor, luego Gutiérrez respondió con “golpes de rodilla”, tirándolo al suelo.
Los dos oficiales golpearon a Nazario varias veces, luego lo esposaron e interrogaron. La parada fue capturada con el teléfono celular de Nazario y las cámaras que usaban Crocker y Gutiérrez, según la demanda.
“Estas cámaras capturaron imágenes de comportamientos consistentes con una repugnante tendencia nacional de agentes del orden que, creyendo que pueden operar con total impunidad, se involucran en abusos de autoridad poco profesionales, descorteses, con prejuicios raciales, peligrosos y a veces mortales”, dicen los archivos judiciales.
El fiscal general de Virginia, Mark Herring, calificó el incidente de “inaceptable” en un tuit el sábado.
Su oficina agregó que estaba monitoreando la situación, ya que Herring pidió al Departamento de Policía de Windsor que sea “completamente transparente”.
El administrador de la ciudad William Saunders confirmó a CNN que Gutiérrez había sido despedido luego de una investigación sobre el incidente iniciada debido al uso de la fuerza.
Saunders agregó que al concluir esta investigación, se determinó que no se siguió la política del Departamento de Policía de Windsor.
Esto resultó en una acción disciplinaria, y los requisitos de capacitación adicional en todo el departamento se implementaron a partir de enero y continúan hasta el presente.
“Desde ese momento, el oficial Gutiérrez también fue despedido de su empleo”. Mientras tanto, Crocker todavía es empleado de la Policía Estatal de Virginia.