Alerta en Táchira: Se registraron más de tres mil casos de diarrea en solo cuatro meses

Alerta en Táchira: Se registraron más de tres mil casos de diarrea en solo cuatro meses

Foto Diario Los Andes

 

 

 





Desde el mes de enero hasta abril, se registraron un total de 3 mil 565 casos de diarrea en el estado Táchira, siendo los municipios San Cristóbal, Junín y Bolívar, los más afectados con esta patología.

Por La Prensa de Táchira

La coordinadora del sistema de información de la división de epidemiología de la Corporación de Salud en la entidad, Mayra Guillen, dijo que esta cifra representa una tasa de morbilidad de 277 casos por cada 100 mil habitantes.

De acuerdo a esta cifra, en los primeros 120 días del año, se presentaron cerca de 29 casos diarios en la región, en todos los municipios de la entidad.

Según Guillen esta patología gastrointestinal disminuyó en más del 40% comparado con el pasado año 2020, que a su juicio, se debe al confinamiento por la llegada de la pandemia del covid-19 a Venezuela.

Alerta gubernamental

El pasado lunes, la gobernadora del estado Táchira, Laidy Gómez alertó el incremento de enfermedades que en su opinión han venido generando un impacto en la salud pública del estado, entre ellas, respiratorias, hipertensión arterial, e intestinales, debido a la carencia de servicios públicos como, gas doméstico y agua potable.

“En esas comunidades donde no llega el agua, se están registrando las enfermedades intestinales en niños y adultos” expresó en rueda de prensa ofrecida a los medios de comunicación.

Sin embargo, en el Hospital Central de San Cristóbal, la situación se mantiene regular ante esta problemática, pues el jefe del servicio de emergencia, Carlos Saavedra dijo que no se han incrementado el número de ingresos asociadas a esta patología.

“Las enfermedades que se presentan con mayor proporción en la emergencia son hemorragias digestivas, la cual puede tener muchas causas que puede venir por procesos cirróticos, procesos ulcerativos, procesos hemorroidal, entre otros” expresó.

Indicó que el porcentaje de pacientes recibidos no es representativo, es decir, de 15 personas, dos podrían tener complicaciones en el aparato digestivo.

“No solo se trata que el agua pueda transmitir enfermedades, se trata de un proceso más complejo, donde en las viviendas por una disposición inadecuada de los tubos de aguas negras y blancas hay filtración de las negras hacia las blancas” dijo Saavedra.

La situación se agudiza en temporada de lluvias, sosteniendo el médico que el vital líquido en Los Andes venezolanos está “cautada” debido a los procesos de aluminización, cloración, entre otros.

Precisó que el tiempo de uso de las tuberías influye en el problema, pues muchas son de vieja data las cuales no han sido sustituidas por parte de las autoridades competentes.

“Esto quiere que decir que no es una tubería de PVC si no envejecida que contamina aguas abajo que pudiera incidir en estas enfermedades” acotó el jefe del servicio de emergencia.

Medidas

El gastroenterólogo, Pablo Ramírez dijo que al no darle el tratamiento adecuado al agua, ésta podría generar infecciones a nivel del estómago, por lo cual como especialista hace un llamado a la comunidad a hervirla entre 10 o 15 minutos.

Si bien es cierto que con la llegada de las lluvias, el vital líquido tiende a ponerse sucio y turbio, se hace necesario someterla a dicho proceso, pues de esta forma se eliminaría los microorganismos que afecten el sistema digestivo.

“Sí el agua viene del chorro, luego de hervir se puede colar para quitar cualquier sedimento que haya en el fondo de la olla la cual será destinada para el consumo” dijo.

Como médico recomendó no beber agua del botellón, pues de acuerdo a experiencias con varios pacientes, les manifiestan que los cilindros contienen larvas y hasta lombrices en el recipiente.

Tampoco ingerir jugos naturales en la calle, pues se desconoce la procedencia del agua con el cual fueron hechos, así como no consumir vegetales crudos en puntos de comidas rápida.

En su consulta, los motivos son, reflujo gastroesofágico, dispepsia funcional, y el síndrome de intestino irritable, esto debido a los malos hábitos alimenticios relacionados con alto consumo de harinas, café y bebidas alcohólicas. También el exceso de grasas y alimentos condimentados que afectan las vías digestivas del ser humano.