Una pareja cruel de Pensilvania mantuvo a sus tres hijos pequeños encerrados en un sótanovacío llamado “el agujero” durante días seguidos, dijo la policía.
Por New York Post
Richard Hayes, de 37 años, de Mount Oliver, y Natosha Bell, de 26, de Rankin, fueron arrestados el miércoles en la escuela primaria McClure en White Oak, donde el hijo de Hayes de 11 años se negó a subir a su automóvil a la hora de la salida, según una denuncia penal obtenida por el Pittsburgh Tribune-Review .
El niño asustado dijo que no quería ser esposado nuevamente mientras se aferraba a un empleado de la escuela, dijo un testigo a la policía.
Hayes abrió la puerta de la minivan y un empleado de la escuela vio a los otros dos hijos de la pareja, de 7 y 10 años, ambos esposados, según la denuncia.
La policía de White Oak detuvo a la pareja y dijo que Hayes también tenía una pistola cargada con él. La policía del condado de Allegheny tomó a los tres niños bajo custodia de emergencia y luego les dijeron a las autoridades en un hospital el trato brutal que sufrieron, según la denuncia.
La policía dijo que Hayes es el padre de los dos niños mayores, mientras que Bell es la madre de los niños de 7 y 10 años. Los tres jóvenes confesaron que estaban encerrados en “el agujero” durante varios días seguidos. Un niño afirmó que estuvo cautivo durante todo un fin de semana, según la denuncia.
Más tarde, los detectives encontraron pruebas que respaldaban las denuncias de abuso en la casa de Hayes, informó WPXI .
La policía informó que “el agujero” era en realidad un sótano de carbón vacío que no tenía luces ni agua y un piso de concreto.
Otra habitación en el sótano también fue conocida como “la celda”, dijeron los niños a la policía mientras describían el cubo que se vieron obligados a usar como inodoro. El niño de 7 años dijo que lo encerraron en la habitación sin colchones ni almohadas para llevar comida cuando tenía hambre, dice la denuncia.
El niño de 7 años también dijo que Hayes se metió la cabeza bajo el agua en una bañera, lo que admitió ante los investigadores, según la denuncia. Según los informes, Hayes también le dijo a la policía que hizo dormir a los tres niños en el piso del sótano y que a veces los había esposado.
La pareja enfrenta 14 cargos en total, que incluyen agresión agravada, encarcelamiento falso y poner en peligro a un menor. Hayes también fue acusado de posesión de un arma en la propiedad de la escuela.
Un juez le negó la fianza el jueves a Hayes. El estado de la fianza de Bell no estuvo disponible de inmediato, informó el jueves el Tribune-Review.
“Este es quizás uno de los incidentes de abuso infantil más graves que he visto en mi carrera”, dijo a KDKA el inspector de policía del condado de Allegheny, Michael Peairs . “Si no hubiera sido por el niño de 11 años que se negó a ingresar al vehículo y los funcionarios de la escuela y los oficiales de policía, si no hubieran notado lo que estaba sucediendo y las banderas rojas e indicadores, el abuso podría haber continuado”.