Nicolás Maduro volvió a admitir este viernes 14 de mayo la corrupción chavista en las principales instituciones del Estado venezolano, justo después de que Tarek William Saab destapara desde el Ministerio Público una trama de enriquecimiento ilícito en la expropiada Lácteos Los Andes.
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“Nosotros tenemos una guerra frontal contra la corrupción y los corruptos”, se atrevió a decir Maduro ante las cámaras de la televisora estatal.
“Por ese camino debemos marchar unidos para defender la ética de millones de venezolanos que creen en nuestro esfuerzo y depositan su voto de confianza en la Revolución”, expresó.
Según la opinión de Maduro, “me acusan de todo y yo ni respondo, que en aquel país pasa algo y es culpa de Maduro, porque si les respondo tengo que decir no no, la culpa la tiene otro”.
Más temprano, Saab señaló de corrupción al presidente de la empresa Lácteos Los Andes CA, coronel Luis Augusto Piligra Jiménez.
De acuerdo con lo relatado por Maduro, se enteraron del caso por medio de la denuncia de una empleada.
“Hace una semana una valiente trabajadora de Lácteos Los Andes denunció y apenas metimos la lupa conseguimos la pudrición, ahí está preso el que era presidente”, enfatizó el vocero chavista. “Está convicto y confeso. Un hombre que tenía una colección de relojes, vehículos y viviendas. Pare de contar todo lo que empezamos a descubrir”, agregó.
Maduro prometió por enésima vez que no volverá a suceder que coloquen “a alguien al frente de una empresa y empieza a robar y robar. Eso hay que combatirlo de frente”.