Los demócratas texanos ganaron una batalla de una guerra que no pueden ganar, a menos que reciban ayuda del presidente Joe Biden y de los legisladores de su partido en Washington.
Por Dallas News
El domingo los demócratas abandonaron de la Cámara de Representantes para neutralizar un proyecto de ley electoral que impulsa el Senado y que dicen discrimina a los ciudadanos de color.
Aprobada por el Senado en las primeras horas del domingo sin opinión de los demócratas, la iniciativa de ley habría establecido horarios uniformes para el periodo de votación adelantada, otorgando más facultades a los observadores electorales de los partidos e impuesto nuevos cargos penales a los funcionarios y asistentes electorales que infringieran las reglas.
Además prohibiría las jornadas de votación de 24 horas y los drive-thru para votar, castigaría a los funcionarios electorales que enviaran solicitudes de boleta postal a personas que no las hubieran pedido, y requeriría a algunas personas que lleven a electores en vehículo a votar entregar su información personal.
La propuesta del senado estatal ordenaba además que la votación adelantada los domingos iniciara a la 1 p.m. en lugar de a las 9 a.m., una estipulación que los críticos aseguran está dirigida a sofocar la afluencia electoral en las iglesias afroamericanas.
“Esta ley hace a los texanos más fácil votar, y a los que quieren violar la ley, más difícil hacer trampa”, dijo Travis Clardy, republicano por Nacogdoches, después de presentar la propuesta en la Cámara de Representantes.
Pero miembros de la bancada en la Cámara de Representantes, incluso algunos que dudaban de romper el quorum como táctica para anular proyectos de ley, accedieron a abandonar el recinto.
Ahora los demócratas texanos están siendo encomiados por sus colegas de todo el país como héroes.
Fue una reacción similar a un rompimiento de quorum más dramático ocurrido en 2003, cuando una mayoría de representantes demócratas abordaron un autobús y se fueron a Ardmore, Oklahoma, para vetar temporalmente un plan republicano de redistritación.
Es muy probable que el gobernador Greg Abbott de Texas añada el proyecto de ley electoral a la agenda de una sesión especial, que podría llevarse a cabo en el otoño, para cuando se tiene planeada una sesión sobre redistritación, si no es que antes.
De modo que los demócratas podrían hallarse ante la necesidad de romper el quorum otra vez.
“Yo declaré la integridad electoral y la reforma del sistema de fianzas puntos de emergencia que deben ser aprobados sin falta en esta sesión legislativa. Es profundamente decepcionante y preocupante para los texanos que ninguno de los dos llegue a mi escritorio”, declaró Abbott el domingo después de que los demócratas abandonaron la cámara.
“Garantizar la integridad de nuestras elecciones y reformar el caduco sistema de fianzas siguen siendo puntos de emergencia en Texas, (por eso) serán añadidos a la agenda de la sesión especial”.
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Sofía Pisani para la Voz de América y LaPatilla.com