Un teórico de la conspiración ha descubierto dos ovnis metálicos idénticos que son “el doble del tamaño de un avión F-16”, descansando sobre la nieve en las montañas de la Antártida.
Por Daily Star
Traducción libre del inglés por lapatilla.com
Graham, que a menudo publica fenómenos OVNI en las redes sociales, dijo que los dos discos ovalados parecían “fuera de lugar” cerca de las montañas Churchill, que están llenas de rocas irregulares.
Al compartir sus hallazgos de Google Earth en su canal Conspiracy Depot, se acerca y revela cuán similares son los dos objetos tanto en forma como en tamaño.
El buscador de la verdad dijo: “Encontré dos objetos de forma ovalada o circular de idéntico tamaño sentados en la nieve. Estos objetos están ubicados cerca de las montañas Churchill y no creo que hayan estado allí tanto tiempo debido a la ausencia de nieve que cubra el objeto. Tienen un aspecto liso y metálico con bordes bien formados, casi de máquina”.
Los llamados platillos son apenas visibles en la nieve, ya que se encuentran cerca de las rocas.
Graham estimó que el tamaño del objeto es de aproximadamente 97 pies de largo, que es el doble de largo que un avión de combate F-16 (49 pies).
“Lo que me atrajo de estos objetos es lo fuera de lugar que se ven en comparación con el entorno circundante en el que se encuentran y todo lo demás parecía ser solo rocas irregulares”, agregó.
También le dijo a Daily Star: “Esto es realmente extraño ya que los objetos son de tamaño idéntico, en forma de platillo y no se parecen a nada en el entorno circundante. Claramente no han estado allí tanto tiempo debido a la ausencia de una capa de nieve en los objetos”.
No es la primera vez que los cazadores de ovnis comparten teorías de conspiración de que la Antártida es una base alienígena o el hogar de gigantes misteriosos.
Un conspirador estaba convencido de que había encontrado la abertura de un túnel subterráneo después de ver “salidas de aire con cúpulas”.
Otro usuario de Google Earth encontró una montaña con una similitud que enfrentar, creyendo que podría ser “algo que las antiguas civilizaciones de la Antártida dejaron atrás”.