Comercio electrónico en Venezuela: ¿Se acabaron las tiendas físicas?

ACOMPAÑA CRÓNICA VENEZUELA CRISIS AME7776. CARACAS (VENEZUELA), 13/11/2020.- Fotografía del 10 de noviembre del 2020 donde se observa a una mujer que observa productos en el pasillo de un supermercado, en Caracas (Venezuela). La venezolana Luznaily Sulbarán abre su nevera y apenas encuentra un pequeño trozo de queso para acompañar las tradicionales arepas que desayunará junto a sus dos hijas, menores de edad, una fría mañana en Los Teques, la capital del estado de Miranda, cercano a Caracas. EFE/MIGUEL GUTIÉRREZ

 

De acuerdo a la Cámara Venezolana de Comercio Electrónico, CAVECOM, sólo en 2020 el comercio electrónico se triplicó en la región y, en el caso de Venezuela, aumentó cerca de 2.000%, es decir, aumentó 20 veces su actividad.

Por El Economista





Por otro lado, de acuerdo con Carlos Aguiló, jefe de Innovación de ECOEM, durante la pandemia el número de usuarios en las redes sociales aumentó cerca de 17%, es decir, se sumaron dos millones de usuarios, siendo todavía Facebook la más activa en Venezuela.

Todo este crecimiento se ha dado a pesar de las condiciones adversas, al menos en cuanto a la infraestructura, de nuestra conectividad. De acuerdo al sondeo de Speedtest.net, que reúne mediciones de velocidades de Internet de una red de usuarios en todo el mundo (ya sea por la aplicación móvil o por la página web), Venezuela tiene la conexión más lenta de la región, con una velocidad promedio (entre la conexión fija y la móvil) de 11.57 megas por segundo. Más bajo que el de Cuba, con 14.83 (gracias a una mejora sustancial a la velocidad de la conexión móvil) y Haití con 15.01 megas por segundo.

Sin embargo, la velocidad de la conexión no ha ralentizado ningún otro proceso. De acuerdo con Aguiló, mientras en la región del Caribe la incidencia promedio de Internet ronda 63% de la población, en Venezuela 72% de la población tiene acceso a Internet. A esto se suma que hay una mayor proporción de conexiones en uso por cada conexión activa.

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