La planta nuclear iraní de Bushehr vuelve a operar tras dos semanas averiada

 

 





La planta nuclear iraní de Bushehr ha reanudado sus operaciones tras dos semanas averiada y en medio de frecuentes cortes de electricidad en el país, informó este lunes la Organización de Energía Atómica de Irán.

El subdirector de esta organización, Mahmud Yafarí, aseguró que se ha resuelto el problema técnico que llevó a la desconexión de la planta de la red nacional eléctrica el pasado 21 de junio y al cese temporal de la producción de electricidad.

“Tras realizar las pruebas necesarias, esta unidad se ha conectado a la red nacional (eléctrica) desde el sábado y, al garantizar su funcionamiento seguro, la generación de energía ha comenzado a partir del domingo”, detalló Yafarí, según la agencia oficial Isna.

Se espera que el funcionamiento de Bushehr pueda ayudar a disminuir los graves cortes de electricidad que está sufriendo el país en los últimos días, similares a los ocurridos a finales del pasado mayo.

Muchos barrios de Teherán están registrando varios apagones diarios de una duración total de más de seis horas, según pudo constatar Efe. Incluso los hospitales se han visto afectados y los generadores no tienen suficiente capacidad.

La reparación de Bushehr se prolongó más tiempo del estipulado. Las autoridades iraníes se limitaron a informar hace dos semanas de que dejaba de funcionar temporalmente por “un problema técnico” que se resolvería en “pocos días”.

No denunciaron en esa ocasión ningún tipo de ataque, como sí hicieron dos días después respecto a un intento de sabotaje contra un edificio perteneciente a la Organización de la Energía Atómica del país, que no provocó daños.

Bushehr, que comenzó a operar en 2011 con una capacidad de 1.000 megavatios, se encuentra a 17 kilómetros de la ciudad sureña del mismo nombre, en la costa del golfo Pérsico.

En 2014, Rusia firmó un acuerdo de cooperación con Irán para ayudar a construir el segundo y tercer reactores de Bushehr, cuya puesta en marcha está programada para 2024 y 2026, respectivamente.

Irán está inmerso en negociaciones con seis grandes potencias para encontrar un mecanismo que permita a Estados Unidos regresar al acuerdo nuclear de 2015, que abandonó en 2018, y a Teherán volver a cumplir con sus compromisos.

El pacto nuclear establecía límites y restricciones sobre el programa nuclear civil de Irán para evitar que pudiera desarrollar bombas atómicas y, a cambio, Teherán obtenía ventajas económicas por el levantamiento de las sanciones internacionales.

EFE