Domingo Alberto Rangel: ¿Cecilia candidata?

Domingo Alberto Rangel @DomingoAlbertoR

Acostumbrados debemos estar:

Tal como desde el 2008 ocurre en cada elección… Cecilia García Arocha comienza a aparecer en los medios.

Y lo hace con tal precisión que se le pueden aplicar las fórmulas matemáticas con las que se predice la aparición de los cometas.





¡Si el CNE programa una elección… la Rectora en seguida comenzara a recordar que ella existe!

El método de aparecer cuando se discuten planchas y alianzas no se puede decir que haya sido exitoso para la Rectora… como tampoco lo ha sido su largo transcurrir por la rectoría de la UCV.

No obstante puede ser que esta vez acierte Cecilia en sus cálculos siendo que en noviembre, entre principales y suplentes se van a elegir cerca de 12. 000 cargos.

Entonces qué la Rectora aspire ni es novedad ni tampoco es algo desechable: ¡sería positivo que la dama fuese postulada por algún partido con tarjeta… en la seguridad de que es probable que salga con otra derrota a cuestas… y que la UCV finalmente pueda elegir alguien más idóneo para dirigir esa institución que desde hace años viene “palo abajo”.

Como siempre Cecilia apunta su campaña a lo que dice haber hecho en pro de la universidad que está a punto de cumplir 300 años. Es lógico que lo haga: total desde los tiempos de Hitler se sabe que mintiendo en los medios se puede convertir un fracaso… en triunfo clamoroso.

En ese sentido la Rectora dice que llegó el momento de rescatar la UCV: ¡bravo eso de “rescatar”!… ¿pero de las garras de quién se ha de redimir nuestra Alma Mater?

Desde 2008 quien ha dirigido la UCV es Cecilia García Arocha… la misma persona que hoy se queja por nimiedades como que “el Aula Magna no tiene luz”.

¡A caramba!

La Rectora olvida que en estos 13 años el Aula Magna siempre tuvo electricidad para alojar actos politiqueros cada vez que Cecilia pensó que apoyando a los héroes de cada momento… llámense Rosales, Capriles… o Guaidò… sería apoyada en sus aspiraciones como candidata a alcaldesa ora de Baruta… ora de El Hatillo o de Chacao… cuando no Gobernadora de Miranda… o diputada.

Y en cada oportunidad la amiga y los electores tuvimos mala suerte porque igual se escogieron bates quebrados que usaron esos cargos para enriquecerse y escalar.

Y es una lástima que Cecilia en sus cálculos y promesas no caiga en cuenta que la UCV fue construida con los fondos que le sobraban en los años 50s a un país hoy día inexistente: fuimos niños mimados del planeta por ser en esos años los primeros exportadores de la savia que movía ejércitos e industrias del mundo… porque Europa y el resto del planeta… salvo los Estados Unidos… en ese momento eran territorios devastados… y los recursos que en la UCV se invirtieron… simplemente no volverán… y tampoco sería sensato invertirlos hoy día en graduar gratis profesionales para que se marchen a otros países.

La candidata por lo que se le escucha en los medios… recita en estos tiempos el mismo cantar de 13 años como “rescatar” una UCV imposible de sufragar para las condiciones actuales.

La Rectora ha sido ciega, sorda y muda ante algo que salta a la vista como son las sanciones que Cecilia nunca condenó… y ante las cuales ni siquiera tomó partido como ante otros problemas tomaron los Rectores que la precedieron… sin tanto ditirambo.

En su largo mandato… signado por renuncias que no se hacen efectivas… amenazas de un gobierno que juega a ser el “bobo feroz”… Cecilia y su equipo han sido parte del problema y es un imposible que a estas alturas una botarata sea útil en la UCV… o en cualquier otro puesto electivo donde se requiere mucha creatividad porque no habrán recursos “para botar”.

La mentalidad universitaria y eso no es culpa de la Rectora, se quedó anclada en el tiempo anterior al internet. El mundo es otro y las universidades… entes medievales… tienen que ser objeto de grandes reformas. Más aún en un país en ruinas.

Esas reformas no las han de llevar a cabo quienes en estos largos años de gobierno académico… el más largo en estos 300 años de la UCV… y desde sus cómodas burbujas… se han visto incapaces de reaccionar… y pretenden “rescatar la UCV”… como si se tratara de un viaje al pasado.

Una vieja solución venezolana consiste en promover a quien no rinde en determinado cargo: digamos que la Rectora podría ser alcaldesa o diputada.

Esa solución fue ineficaz ya a finales del siglo anterior y peor sería esperar que en estos tiempos de guerra… funcione el método de la Celestina.

Cecilia se merece una buena jubilación y pase de página… los vecinos del este ya tenemos nuestros problemas con los politiqueros locales –salvo excepciones-… para importar una catástrofe anunciada.

¡Zape!