La crisis hídrica en la ciudad se intensifica y las autoridades no le dan prioridad al sector salud. Este centro hospitalario, que fue referencia en el país por la calidad del servicio en la Unidad de Caumatología, hoy está sin insumos y en ruinas.
Por: Corresponsalía La Patilla
Los olores fétidos en los pasillos, la acumulación de heces en los baños, no hay agua potable en los filtros para los pacientes que acuden a consultas y, en muchas ocasiones, las operaciones quirúrgicas se suspenden por falta de agua, son algunos de los problemas a los que se enfrentan los usuarios del centro de salud. Ya suman siete meses que el hospital no recibe agua potable.
Los familiares de los pacientes, quienes pernoctan en las áreas verdes del hospital, a diario deben suministrar entre 20 litros y 40 litros de agua para los pacientes, que es utilizada para beber, bañarse y limpiar la habitación. También deben comprar los medicamentos e insumos para la atención de los enfermos.
Jorge Ramírez reside en la Costa Oriental del Lago y tiene un familiar hospitalizado. No posee vehículo propio y padece una infección en los huesos que amerita atención y aseo. A diario debe buscar agua en los sectores cercanos al hospital, apelando a la solidaridad de los vecinos para que le regalen el líquido. Estos también sufren por la falta de suministro de agua por tuberías y deben comprarla.
“Como familiar te sientes desesperado, agotamos todas las vías. No es posible que ni el agua puedan garantizar en un hospital. Ya estamos cansados como ciudadanos de tanta corrupción y desastre, pero seguro que en las casas de los gobernantes nunca falta el vital líquido”, se quejó Ramírez.
Manuel Díaz es paciente y ve con preocupación la situación del centro de salud. “Años atrás este hospital siempre estaba pulcro, todo funcionaba. Hoy en día hay que traer hasta las jeringas para las terapias, filtros sin agua para tomar, todo está viejo, sucio y poco operativo. Todo lo que toca este gobierno, lo acaba”, señaló Díaz.