Juan Pablo García: El G-2 visible en Venezuela

Juan Pablo García: El G-2 visible en Venezuela

Conversaba con un viejo amigo, por estos días, sobre las consabidas acusaciones contra los servicios norteamericanos y soviéticos que daban su pelea en América Latina, en los tiempos de la Guerra Fría. Conocida la más amplia filmografía y novelística sobre el espionaje, siempre se supuso de una actividad muy encubierta, disfrazada o disimulada que hacía del oficio algo muy sofisticado y sumamente arriesgado. En ese pleito, por ejemplo, estuvieron la KGB y la CIA en Chile, pero de una agencia es todavía poco de lo que se sabe y fue capaz de hacer, teniendo por epicentro a La Habana, y de la otra, al menos, son muchos los documentos desclasificados ahora, por no mencionar la polémica de la opinión pública y los controles parlamentarios a la que se ha sometido en n país libre.

Digo esto, porque los viejos denunciantes comunistas de la CIA, desvergonzadamente callan sobre el festival de intervencionismo que se ha hecho en Venezuela. Y es porque casi todos ellos, están metidos en el negocio del sapeo, porque es un negocio la extorsión y la delación aún entre los camaradas mismos. El comunismo es un perpetuo chantaje a todos los niveles. Toda la sociedad es víctima de los capos del poder y sus lugartenientes. Es la verdad.

Nada más visible que la presencia y el concurso de todos los servicios de inteligencia y contrainteligencia del mundo que pelean por sus bastardos intereses antioccidentales con la protección de Nicolás Maduro. No es el SEBIN ni DGCIM, u otro agazapado organismo el que los coordina, sino el G-2 que se arroga el mérito de haber montado en el poder a Hugo Chavez, siendo el primus interpares en el saqueo de nuestras riquezas y la esclavitud de los venezolanos. Nicolás, Jorge y Delcy Rodríguez, son los agentes por excelencia del G-2, así le pese al teniente Diosdado Cabello y a su sargento técnico Pedro Carreño, obligados a rendirles pleitesía. La pandemia es un pretexto para la insalubridad, las pésimas condiciones de vida de los venezolanos. Los centenares de miles de médicos nada han hecho por la salud en Venezuela, en veinteaños, como tampoco lo han hecho en Cuba, por más de sesenta. Y es que los especialistas hablan de que las ¾ partes son soldados y un elevado porcentaje comisarios políticos de los militares y funcionarios públicos esparcidos en todo el país. Todo el mundo sabe que estamos llenos de sapos y de agresores. Faltando poco, hasta se dio el tupé Nicolás de anunciar que el embajador cubano asiste y recibe cuentas del consejo de ministros. Al fin y al cabo, es el jefe del gabinete. ¡En Venezuela coordina y manda el G-2!