Problemas de seguridad y deficiencias en el suministro de combustible, afectan la producción en fincas de la zona sur del estado Anzoátegui.
Por: Susana Quijada / La Patilla
La extorsión y el cobro de vacunas continúan azotando las labores que intentan realizar los productores por mantener sus fincas operativas.
El coordinador de seguridad de las asociaciones de productores Aprogan y Aprosa, Jesús Paraqueima dijo que maneja informaciones de dueños de fincas a quienes el hampa les cobra como vacuna entre 500 y 1500 dólares.
“Los productores Agropecuario seguimos recibiendo pues cualquier cantidad de llamadas por parte de delincuentes, de bandas organizadas que amenazan con secuestrar, meterse en nuestras fincas y dejarnos sin nada, hay cobro de vacunas a productores nuestros, sobretodo a los grandes productores y por supuesto que esto perjudica la producción local y regional”, explicó Paraqueima.
El productor dijo que contabiliza un aproximado de 15 extorsiones cometidas contra dueños de fincas, que en su mayoría no son denunciadas por temor.
Recordó que durante el pasado año 2020 en la zona sur se registraron 12 secuestros.
También dijo que actualmente en el campo son acechados por los “chatarreros” quienes irrumpen en las fincas y desmantelan estructuras en búsqueda del material ferroso.
Otro grave problema que afrontan comentó, es las deficiencias en el suministro de combustible que les impide llegar a sus unidades de producción.
“Tenemos un gravisimo problema respecto al suministro de gasoil y gasolina, hay un problema en la distribución, hay un decreto Presidencial del año pasado que nosotros somos un sector priorozado, es imposible, la estructura de costo no nos da para pagarla a 0.5 y mucho menos a 1 dólar o 1.5 que es en lo que la están vendiendo ahorita en la calle”, expresó Paraqueima.
Un productor que prefirió omitir su nombre por temor a represalias contó, que hace unas semanas tres delincuentes irrumpieron en su finca ubicada en el municipio Pedro María Freites y le robaron el vehículo, celulares y algunos objetos.
Pero no todo quedó hasta allí porque luego lo contactaron para cobrarle 600 dólares como vacuna.
La víctima colocó la denuncia en el Comando Nacional de Anti Extorsión y Secuestro, de quienes espera justicia.