El portugués evidenció toda su frustración dentro del campo de juego.
Por infobae.com
Fue una verdadera jornada de terror para el Manchester United. El equipo dirigido por Ole Gunnar Solskjaer cayó por 5-0 en condición de local ante Liverpool, un resultado que cala hondo en lo deportivo pero también en lo emocional. Nadie podría haber pronosticado una diferencia tan amplia en Old Trafford y, como era de esperarse, el portugués Cristiano Ronaldo fue una de las caras de la derrota.
El desarrollo del partido para los Diablos Rojos llevó a que CR7 tuviera una serie de reacciones que dejaron al desnudo su total frustración. Poco pudo hacer el ex Real Madrid para revertir una situación que se presentó adversa desde el comienzo. El primer signo de impotencia se dio en el tiempo de descuento de la primera parte, cuando su equipo ya estaba 3-0 abajo. En ese momento, fue a pelear una pelota con Curtis Jones y terminó pegándole una descalificadora patada en el suelo al jugador del equipo rival. De hecho, el pisotón en la espalda con el que culminó la acción generó un enojo de parte de algunos futbolistas del conjunto que dirige Jürgen Klopp, quienes fueron a increpar al 7 del United por su reacción.
Estaba claro que esta no iba a ser la tarde del Manchester United y de Cristiano Ronaldo, que ni siquiera pudo quedarse con el gol del honor. A los seis minutos de la segunda parte, Harry Maguire robó una pelota en el mediocampo y mandó un pase largo para la posición del portugués, que amagó ante la marca de dos defensores y se hizo el espacio para sacar un estupendo remate al segundo palo. Era un verdadero golazo, pero la acción quedó invalidad luego de que el VAR confirmara que el atacante estaba en posición adelantada. Fue un offside demasiado fino, pero avalado por la tecnología.
Esa acción pareció dejar en claro que ya no habría nada para hacer para los de Solskjaer, que cayeron sin atenuantes ante los de Klopp por los tantos convertidos por Naby Keita (5?), Diogo Jota (13?) y Mohamed Salah, en tres oportunidades (38?, 45?+5? y 50). Los locales terminaron el encuentro con diez hombres por la expulsión en el segundo tiempo de Paul Pogba, quien vio la roja por una brutal patada contra el autor del primer gol.
Luego del gol anulado a CR7 el marcador ya no se movió y Liverpool consiguió una aplastante victoria que le permite llegar a los 21 puntos y ubicarse segundo en la tabla de posiciones, uno por debajo del líder, Chelsea, y uno por encima del Manchester City. Los tres parecen haberse separado del resto. Por su parte el United quedó séptimo, con 14 unidades y las críticas sobre el entrenador Ole Gunnar Solskjaer aumentan.