Amazonía brasileña tuvo en noviembre el menor número de incendios en 21 años

Amazonía brasileña tuvo en noviembre el menor número de incendios en 21 años

Amazonía brasilera, imagen publicada en la cuenta de la actriz Úrsula Corberó.

 

La Amazonía brasileña, la más extensa selva tropical del planeta, registró 5.779 focos de incendio en noviembre, un 50 % menos que los notificados en octubre pasado y el menor nivel de fuego para este mes en 21 años, informó este miércoles el Gobierno.

Frente a noviembre de 2020, cuando se reportaron 6.321 focos de calor en este bioma, la caída fue de 8,5 %, según los datos divulgados hoy por el Instituto Nacional de Investigaciones Espaciales (INPE).





Se trata de la cuarta baja consecutiva de los incendios en la Amazonía brasileña este año y el menor número reportado desde el año 2000 cuando fueron registrador 5.497 focos de fuego.

Desde el primero de enero y hasta el 30 de noviembre se han contabilizado 73.494 focos de fuego en este ecosistema, un 26 % menos que los registrados el año pasado durante el mismo período.

Este es el primer año del Gobierno de Jair Bolsonaro en que los incendios de la Amazonía caen. En 2020 fueron registrados 103.161 focos de fuego y en 2019, cuando las llamas en la mayor selva tropical del planeta le dieron la vuelta al mundo, cerca de 90.000.

De acuerdo con el Gobierno brasileño, un total de 8.000 profesionales vinculados con autoridades ambientales, la Policía Federal y la Fuerza Nacional de Seguridad Pública y de autoridades ambientales, se han desplazado este año a la Amazonía y a otros ecosistemas como el Pantanal y el Cerrado para apoyar la lucha contra los incendios.

No obstante, el apoyo de las fuerzas de seguridad para controlar los incendios no ha sido efectivo en la lucha contra la deforestación de la selva, la principal causa de las llamas en la Amazonía, provocada en buena parte por la minería ilegal y el comercio ilícito de madera.

Entre agosto de 2020 y julio de 2021, la Amazonía brasileña perdió 13.235 kilómetros cuadrados de cobertura vegetal, la mayor área degradada para un período de doce meses en los últimos 15 años y un incremento de 22 %, en el comparativo interanual.

Solo hasta el 19 de noviembre, se registraron alertas de devastación en 136 kilómetros cuadrados de vegetación nativa, casi la mitad de los 309, según las imágenes satelitales del INPE. EFE