Daniel Aray asume su discapacidad como “un exceso de ritmo y tumbao al caminar”

Daniel Aray asume su discapacidad como “un exceso de ritmo y tumbao al caminar”

 

Hoy es el Día de las Personas con Discapacidad, declarado en 1992 por la Asamblea de las Naciones Unidas, momento propicio para conocer la historia de Daniel Aray, joven merideño de 30 años de edad, que al momento de su nacimiento sufrió una parálisis cerebral.





Por Jesús Quintero La Patilla

Pero esto no ha sido impedimento para que poco a poco, sin prisa, pero sin pausa, haya ido alcanzando sus sueños. Aray es TSU en Asistencia Social, Coach Motivacional y tiene su propia marca personal #ConDanielAray, además de ser conferencista y conductor del segmento radial “Orgullosamente Diferente”.

Daniel se considera un ser auténtico, que se transformó con la adversidad y que, por supuesto, ha aprendido de los traspiés y retos que le ha presentado la vida.

La autoaceptación ha sido quizás el mayor reto que Daniel ha tenido que enfrentar, entender que cuenta con una discapacidad, pero sobre todo luchar contra el estigma y la etiqueta social por ser una persona diferente en la escuela, el liceo, la universidad, en la vida diaria.

Daniel trajo al tapete una frase especial: “La gente está tan acostumbrada a lo común, que le tiene miedo a lo diferente”. Con actitud positiva y perseverancia ha logrado poco a poco vencer el estigma social sobre la discapacidad.

Aray ve cada día como una oportunidad, un nuevo reto de superación, un renacer para aprender y emprender nuevos propósitos, mirando desde adentro, más allá de lo superficial y de lo común. Ve su discapacidad, no como un obstáculo, sino como una habilidad especial, un súperpoder para empoderar a los demás desde su experiencia y estilo de vida, orgullosamente diferente.

La marca #ConDanielAray ha sido un trampolín para dar a conocerse en los medios de comunicación y en las plataformas digitales, lo que le exige a Daniel una preparación continua para ofrecer a los espectadores contenido de calidad contado siempre desde el lado humano.