El papa Francisco espera que el Jubileo 2025 restablezca la esperanza tras la pandemia

El papa Francisco espera que el Jubileo 2025 restablezca la esperanza tras la pandemia

El papa Francisco en una misa en la Basílica de San Pedro el pasado 2 de febrero. EFE/EPA/ALESSANDRO DI MEO

 

El papa Francisco desea que el Jubileo de 2025 ayude a restablecer “un clima de esperanza y confianza” en el mundo tras los duros años de la pandemia de coronavirus, marcados por la muerte y la incertidumbre.

En una carta dirigida al presidente del Consejo Pontificio para la Nueva Evangelización, monseñor Rino Fisichella, divulgada este viernes, el pontífice lo invita a preparar la conmemoración de los primeros 25 años de la iglesia en el siglo XXI.





“Confiamos plenamente en que la epidemia pueda ser superada y el mundo recupere sus ritmos de relaciones personales y de vida social”, confiesa el papa.

El pontífice argentino recordó que en los dos últimos años no ha habido país que no haya sido afectado por la inesperada epidemia que, “además de hacernos ver el drama de morir en soledad, la incertidumbre y la fugacidad de la existencia, ha cambiado también nuestro estilo de vida”.

El próximo Jubileo “puede ayudar mucho a restablecer un clima de esperanza y confianza, como signo de un nuevo renacimiento, que todos percibimos como urgente”, recalcó.

Eso será posible “si somos capaces de recuperar el sentido de la fraternidad universal, si no cerramos los ojos ante la tragedia de la pobreza galopante que impide a millones de hombres, mujeres, jóvenes y niños vivir de manera humanamente digna”, subrayó.

El papa recordó que durante la pandemia se cerraron iglesias, “así como las escuelas, fábricas, oficinas, tiendas y espacios recreativos”.

“Todos hemos visto limitadas algunas libertades y la pandemia, además del dolor, ha despertado a veces la duda, el miedo y el desconcierto en nuestras almas”, afirmó.

La iglesia suele organizar un Jubileo “ordinario” cada 25 años, durante el cual se programan actos con jóvenes, enfermos y presos, se abren las puertas santas de todas las catedrales del mundo, mientras peregrinos viajan a Roma para obtener la indulgencia plenaria. AFP