Qué hay detrás del motín que protagonizaron los detenidos del Cicpc en Valencia

 

 





 

 

La mañana de este jueves se registró una protesta en los calabozos de la delegación municipal del Cicpc Las Acacias, en Valencia, por parte de reclusos que exigieron respeto a sus derechos humanos.

Por Corresponsalía lapatilla.com

Se conoció que los reclusos habrían prendido fuego en los calabozos alrededor de las 6 de la mañana. Al lugar llegaron comisiones de la Policía de Carabobo, Sebin y Bomberos de Valencia.

Según una versión extraoficial, la situación se trató de un motín e intento de fuga. No se registraron víctimas mortales ni heridos.

 

 

Por su parte, en las cercanías del centro preventivo, familiares de los internos denunciaron humillaciones, maltrato y falta de atención médica.

Marina Bautista, familiar, manifestó que en las requisas, los funcionarios les quitan los insumos personales a los reclusos.

 

Anny Zerpa, familiar de detenido

 

“Les caen a palos, les botan la ropa, la comida, todas las cosas de ellos. No les dejan pasar comida, ni agua, ni nada de eso, a veces duran todo un día sin comer esos muchachos. Si los sacan para la fiscalía, a veces van hasta descalzos, porque a mi nieto lo sacaron descalzo a los tribunales”, expresó Bautista.

 

Marina Bautista, familiar de detenido

 

Anny Zerpa, madre de un detenido en la delegación del Cicpc Las Acacias, señaló que su hijo es paciente urológico, pero no recibe la atención médica adecuada. Agregó que actualmente hay varios reos con afecciones respiratorias y hepatitis.

“Mi hijo tiene una infección respiratoria desde hace un mes y no me han dicho qué medicinas necesitan ni me entregan los informes médicos (…) “Ellos (los detenidos) están cansados de las irregularidades adentro. Si se enferman, no los sacan al médico, no nos dan noticia, nos damos cuenta cuando ya el familiar se está muriendo”, aseveró.

 

Alexis Perozo, familiar de detenido

 

Los familiares también denunciaron que tienen que “pagar vacunas” para que los detenidos sean trasladados a tribunales.

“Me han solicitado gasolina; si no tengo gasolina, me piden cinco dólares o 10 y si no lo doy no sacan el muchacho al Palacio. Entonces me toca darlo porque esa es una vacuna”, aseguró Alexis Perozo, familiar.

Además, indicaron que el régimen de visitas no se cumple con regularidad. Los familiares pidieron a las autoridades que cesen las violaciones de derechos humanos a los detenidos.