En la recta final, por Rafael Veloz García @Rafaelvelozg

En la recta final, por Rafael Veloz García @Rafaelvelozg

No vamos a exponer una simple percepción en este nuestro artículo de opinión de esta semana. Vamos a enunciar algo que es una tangible realidad que hemos observado en el transcurso de la gira nacional que adelantamos desde hace semanas, para llevar a los ciudadanos del país el mensaje del Movimiento Salvemos a Venezuela. Se trata del masivo interés de los ciudadanos en unirse a esta acción de manera organizada para buscar el cambio político en Venezuela lo antes posible, a través de las herramientas que nos otorga la constitución nacional.

Contar aquí todo lo vivido es imposible por razones de espacio, pero sí hay factores que son dignos de resaltar y que merecen por lo tanto amplia difusión, para que los venezolanos tengan la oportunidad de estar bien informados sobre todo lo que acontece en relación al Movimiento Salvemos a Venezuela, que no es solo un título sino una acción bien diseñada para el logro de los objetivos que tenemos planteados.
Como señalamos, nos mantenemos en el recorrido de la gira por los estados del país, en la que no solo hemos sostenido reuniones y establecido contactos en las capitales de las entidades visitadas, sino también en otras poblaciones en el interior de esos estados. En todos ellas son innumerables los problemas con los que tienen que lidiar a diario los ciudadanos. La mayoría están relacionados con el tema de la precariedad de los servicios públicos que, en honor a la verdad, es una situación mucho más grave que la que se vive en Caracas, lo que es decir bastante.

Entre los principales problemas que están presentes en todos los estados tenemos dos muy acentuados. El suministro regular de agua potable es uno. Hay comunidades con meses y hasta años sin recibir una sola gota de agua y cuando llega queda en evidencia el grado de contaminación que trae consigo. Otro es el racionamiento del servicio de energía eléctrica y/o los continuos apagones y bajones en la tensión eléctrica, que provocan cortes intermitentes y que han sido causa de primer orden en el desperfecto de los aparatos electrodomésticos de los venezolanos, que en algunos casos obligan a su reparación, con el elevado costo que esto supone, pero en otros resultan en su total pérdida. El Estado está obligado a resarcir esos daños, pero sencillamente no lo hace.





También existen otros problemas muy frecuentes que tienen que ver con el saneamiento ambiental, tema de la recolección de basura incluido; el lamentable estado de los centros hospitalarios, por la falta de insumos médicos y de aparatos para tratamientos y diagnósticos. Igualmente la falta de combustible o la eliminación de la gasolina subsidiada; el alumbrado público, gas doméstico, delincuencia, invasiones a la propiedad privada, deterioro de las vías públicas, de los planteles educativos y del servicio de telecomunicaciones, en el que sobresale la ausencia total o fallas de internet y las de telefonía residencial de Cantv.

El panorama es dantesco como se puede apreciar, por lo que las comunidades a diario en todo el interior del país salen a las calles a protestar con mayor frecuencia que en Caracas, por ejemplo. A esas protestas por servicios públicos básicos se unen las que realizan por salarios dignos y la de los pensionados y jubilados, cuyos ingresos no les permiten cubrir sus gastos por conceptos de alimentos y medicinas. Lamentablemente, esas protestas y ese clamor de solución a los problemas de los ciudadanos caen en saco roto.

Frente a ello, sin temor a equivocarnos, hay que decir que la categorización de Estado fallido se ajusta por completo al venezolano, todo por causa de la corrupción, la desidia y la incompetencia, que demuestran que al régimen de Nicolás Maduro, padre de la crisis humanitaria de Venezuela, en nada le importa lo que sufren los ciudadanos de nuestra nación. Y también es una muestra que desnudan la realidad que llevó a muchos venezolanos a emigrar a otras naciones en búsqueda de la calidad de vida que merecen y que el gobierno usurpador les niega.

Hoy, como parlamentarios de la legítima Asamblea Nacional electa en 2015, podemos afirmar que nuestro compromiso con la gente ha crecido aún más. A todos esos ciudadanos que hoy pasan penurias queremos decirles que buscaremos la solución a esos problemas de manera prioritaria una vez que hayamos puesto el punto final al régimen de Maduro. No lo duden.

El punto de referencia

Durante nuestra gira tuvimos la ocasión de sostener una interesante y muy útil reunión con el alcalde Duglas Rojas del Municipio Rómulo Gallegos del estado Apure. El equipo encabezado por el colega diputado Freddy Superlano y quien escribe no solo apreciaron de cerca la dura realidad que allí se vive sino también la importancia de una verdadera unión de todos los factores de la oposición del país.

En todas las reuniones, asambleas, contactos con los líderes sociales y políticos el punto de referencia en esta etapa de lucha es lo sucedido en el estado Barinas, con su doble éxito en las elecciones regionales del 21 de noviembre de 2021 y del 9 de enero de 2022. De todos esos encuentros el resultado es que la unión sí es posible, hoy más que siempre, porque ese ideal de Simón Bolívar, del auténtico, no del apócrifo comunista que nos vende el régimen, está vivo entre nosotros, por ser un ideal de libertad.

La unión ciudadana, como medio para alcanzar la libertad, es la manera de enfrentar al régimen, el cual sabemos que utiliza de manera arbitraria e ilegal todos los fondos públicos, todos los recursos del Estado, así como el amedrentamiento con las fuerzas militares y el sistema de justicia, para arrebatar los derechos ciudadanos y torcer su voluntad.

Hay algo muy significativo. En todos esos encuentros que hemos sostenido en el interior del país las personas ya sienten que están en la recta final hacia el cambio político, el cual se logrará a través de las elecciones presidenciales y parlamentarias, que nos deben, y que son los objetivos del Movimiento Salvemos a Venezuela. Y no están equivocadas, porque no hablamos de grupos reducidos de personas, pues los lugares donde hemos realizado asambleas se hacen pequeños por la presencia masiva de ciudadanos.

Lo anterior, repetimos, emerge de manera tangible en la reuniones del Movimiento Salvemos a Venezuela, donde hacen vida distintas organizaciones políticas y en el que se han incorporados importantes líderes sociales, incluyendo políticos de Acción Democrática, Un Nuevo Tiempo y Primero Justicia, que han participado junto a nosotros en esos encuentros, porque el interés va más allá de los intereses particulares y partidistas. El único interés es el urgente cambio político, que es salir de la dictadura para iniciar la reconstrucción de nuestro país.

Nosotros seguiremos avanzando sin pausas, para volver a prestar también especial atención al interior de los estados. Ya próximos a cubrir todo el país en nuestro peregrinaje, como hemos hecho, continuaremos escuchando a los ciudadanos y a los líderes políticos de las regiones.

A la par, como dirigentes de Voluntad Popular que somos, seguiremos invitando a los miles de activistas de nuestra organización política a participar en el proceso de legitimación y de renovación de nuestras autoridades, donde miles de personas van a acudir a los municipios a expresarse con el fin de poner en sintonía a Voluntad Popular en lo que es el cambio político y para poder elegir de verdad en una elección transparente y democrática al candidato de la oposición a la presidencia de la república.

En el pasado hemos cometido errores y el propio Presidente encargado de Venezuela, Juan Guaidó, lo ha reconocido. Pero de ellos hemos aprendido, para no repetirlos, por lo que esos errores podemos decir que hoy se traducen en una importante experiencia.

Seremos francos. Creemos que en realidad nos encontramos en la recta final de alcanzar la meta del cambio político en el país. La certeza nace en el firme espíritu de unidad que hemos observado en los ciudadanos, no solo en las capitales sino también en el interior de los estados, durante ese proceso de construcción de la unión del pueblo venezolano, que nos conducirá a una rotunda victoria en un momento que ya se avecina.

 


Dr. Rafael Veloz García, diputado a la Asamblea Nacional y al Parlasur electo en 2015, expresidente de la Federación Interamericana de Abogados (FIA), miembro de la dirección nacional de Voluntad Popular, VP.