Francia ha entregado equipamiento militar a Ucrania por valor de 100 millones de euros desde que empezó la invasión rusa el pasado 24 de febrero y tiene intención de seguir movilizada en su ayuda y para lograr la paz, aunque teme que el conflicto va a continuar con “otras atrocidades”.
La cifra de los 100 millones la dio este miércoles el portavoz del Gobierno francés, Gabriel Attal, que en la conferencia de prensa posterior al Consejo de Ministros, hizo hincapié en que desde la anexión rusa de Crimea en 2014 y el inicio del conflicto en el Donbás, Francia había sido el primer proveedor de armamento de Ucrania.
Attal insistió en la “movilización absoluta” de su país en apoyo de Ucrania, que va a continuar, también “para encontrar una solución diplomática”.
Esa vía diplomática se va a concretar en nuevas conversaciones telefónicas en los próximos días del presidente francés, Emmanuel Macron, con sus homólogos de Ucrania, Volodímir Zelenski, y Rusia, Vladímir Putin, en unas fechas y horas que el portavoz dijo no poder precisar.
Además, indicó que su país tiene intención de “ir todo lo lejos que sea posible en las sanciones” contra Moscú, dentro del marco de la Unión Europea.
Algo que se ha hecho hasta ahora con la condición de una unanimidad que parece más difícil de conseguir cuando de lo que se trata es de decidir -para próximos paquetes de sanciones- un embargo sobre el petróleo y el gas rusos.
Attal se refirió también a las “decenas de toneladas” de ayuda humanitaria y sanitaria que Francia ha enviado a Ucrania, así como a los forenses y gendarmes franceses especialistas en criminalística que asisten a las autoridades ucranianas para aclarar la comisión de matanzas en zonas que han estado ocupadas por tropas rusas.
A ese respecto, Macron evitó este miércoles hablar de genocidio en Ucrania, como lo ha hecho el presidente de EE.UU., Joe Biden, porque a su parecer la “escalada” verbal no es útil para su objetivo de detener la guerra, aunque insistió en que el ejército ruso ha cometido “crímenes de guerra” y se tendrán que depurar las responsabilidades de los responsables ante los tribunales.
El portavoz de su Gobierno advirtió de que, teniendo en cuenta la situación actual del conflicto “esperamos otras atrocidades”, sobre todo porque se cree que el presidente ruso, Vladímir Putin, quiere presentar algún tipo de victoria a su país en las celebraciones del 9 de mayo, cuando se conmemora allí el final de la Segunda Guerra Mundial.
EFE