Beatrice E. Rangel: El eterno medievo Latino Americano

Beatrice E. Rangel: El eterno medievo Latino Americano

Se aproxima otro auge de materias primas que es el resultado de la ruptura que indujo el COVID 19 en la cadena de suministro mundial y la ocupación de Ucrania que protagoniza Rusia. Muchos analistas están prediciendo que este será le dispositivo de lanzamiento de algunas economías regionales hacia el desarrollo.

La historia sin embargo parece contradecir estas optimistas visiones. Desde el siglo XVII a esta parte se han producido 15 auges de materias primas sin que los países de América Latina que cuentan con capacidad de producción se hayan desarrollado. De hecho, la economía que mas ha crecido y formado clase media en el continente es la de México a partir de la suscripción de NAFTA con estados Unidos y Canadá en 1995.

El resto de las economías pese a exhibir en algunos casos altas tasa de crecimiento no lograron romper la barrera del subdesarrollo. Y la razón de este fracaso emana de la ausencia de un marco institucional propicio a la creación de riqueza. As instituciones que favorecen la creación de riqueza le dan prioridad absoluta a la protección de la libertad del individuo por encima de cualquier otro fin. En consecuencia, facilitan la construcción del bien común a partir de la búsqueda individual el bienestar. Las instituciones que rigen la vida de los latinoamericanos por el contrario promuevan la extracción de rentas en lo económico y el corporativismo en lo político. La extracción de rentas impide el crecimiento pleno de un sistema económico. Porque para que la extracción de rentas sea eficiente el número de participantes debe ser controlado. Esto fomenta la exclusión de sectores portadores de la innovación. Y por tanto las relaciones políticas no son competitivas sino corporativistas. Cada segmento social está representado por una corporación. Esa corporación tiene una cúpula. La cúpula tiene acceso a los más jugosos negocios; a los mejores servicios del estado y la protección legal. El resto de la sociedad está sujeta un pugilato para obtener trabajo; para accesar los servicios públicos y para hacer valer el estado de derecho. Esto explica la conducta dictatorial seguida por muchos lideres democráticos de la región que se concretan en la ausencia de independencia del poder judicial, nepotismo, amiguismo y, desde luego, la inmortal Hidra Lerma de la corrupción.





Este marco institucional tiene partida de nacimiento en el Medievo. Etapa histórica que nunca separo religión de estado; nunca sustituyo conocimiento por dogma y jamás pensó que los hombres y mujeres que formaban parte de las tribus que ocuparon el territorio de cada señor feudal tenían derecho a la libertad. Se confirma así lo que muchos estudiosos de a la historia han indicado: Latino América no formo parte de la Ilustración. Por tanto, el marco institucional regional es desde hace 500 años un enclave medieval. Ese enclave represa las fuerzas productivas e impide el desarrollo del talento innovador. Así nuestras naciones llevan una camisa de fuerza que de no levantarse impedirá el aprovechamiento de condiciones objetivas favorables al desarrollo para alcanzar la prosperidad como ya ha ocurrido 15 veces en los últimos 3 siglos.