El papel del control horario en la flexibilidad y cómo esta influye en la productividad

El horario flexible ha demostrado ser beneficioso para las empresas y empleados. No solo se nota un aumento en la productividad, sino también en el ambiente laboral. Sin embargo, muchas empresas se resisten a implementarlo. 

Y si es tan buena la flexibilidad horaria, ¿por qué se resisten las empresas a aplicarla?





Porque muchas de estas empresas carecen de un sistema de control horario como el ofrecido por Papershift para poder disfrutar de una flexibilidad funcional. Por eso, hoy vamos a abordar ambos temas y su influencia en la productividad. 

¿En qué consiste el control horario y cuáles son los métodos que existen?

El control horario es el registro de las jornadas laborales que deben llevar todas las empresas, desde que inician hasta el final, de cada uno de los empleados. Esto incluye los descansos, las horas extras y los días de ausencia por vacaciones. 

En el  Real Decreto-Ley 8/2019, se estableció la obligatoriedad de llevar y cuestionar este registro.

Ahora bien, las empresas tienen tres métodos para llevar dicho registro:

Métodos manuales. Es la menos efectiva, ya que tiende a generar errores y no existe un control real de entradas, salidas y ausencias. 

Métodos de identificación. Muy usada por las grandes empresas, requiere la instalación de lectores de huellas dactilares o carnets. Es un sistema costoso para las Pymes. 

Métodos automatizados. La mejor alternativa para la flexibilidad horaria porque participan los empleados y los empleadores. Se puede fichar a través de una app y da mayor control al personal de RR. HH. 

¿Qué es la flexibilidad horaria? ¿Qué beneficios representa tanto para empleados como empresas?

La flexibilidad horaria es un método de gestión de personal la cual tiene como finalidad adaptarse a las necesidades de los empleados. En pocas palabras, se centra en la conciliación familiar. 

Los beneficios de esta modalidad de jornada laboral son para ambas partes; empresas y empleados. 

Estos últimos se benefician de:

Pasar más tiempo con la familia. 

Tener tiempo libre para hacer procesos personales. 

Aliviar las cargas de estrés laboral. 

Tener un mejor balance entre la vida y el trabajo. 

Por su parte, las empresas gozan de:

Un mejor clima laboral en la organización. 

Aumenta la productividad y el rendimiento de los empleados. 

Bajan los niveles de absentismo en la empresa. 

No son necesarios gastos extras.

Los trabajadores están más satisfechos. 

Es decir, la flexibilidad horaria es un ganar-ganar. 

¿Qué se entiende por work-life balance y por qué es importante?

Este término traído del inglés hace referencia al tiempo y recursos que inviertes en tu trabajo, comparado con el tiempo y recursos que inviertes en el resto de actividades de tu vida. Es decir, el balance que hay entre tu vida personal y laboral. 

Este balance es de suma importancia para que las personas puedan tener bienestar físico y emocional. 

Se trata de que trabajes las horas estipuladas y te pueda quedar tiempo libre para compartir con tu familia, amigos y hacer deporte. Cuando esto está balanceado, disfrutarás mejor tu vida en general. 

¿Cómo facilita la implementación del control horario cuando se busca tener flexibilidad horaria? 

A través del control horario automatizado las empresas pueden registrar las horas trabajadas en cualquier momento. Además, permiten planificar y ver cómo se distribuirá la jornada laboral de cada empleado. 

Con esto, se puede implementar la flexibilidad horaria, ya que un trabajador puede planificar por adelantado su semana o incluso el mes. Conociendo registros anteriores y agendándolos en el sistema de control horario. 

Por eso, las empresas cada vez optan más por un sistema de control automatizado que les facilite este tipo de flexibilidad.