Chávez prometió convertir a Falcón en una “isla eléctrica” y lo que dejó fue un peladero de chivo

Chávez prometió convertir a Falcón en una “isla eléctrica” y lo que dejó fue un peladero de chivo

El Parque Eólico fue un engaño que costó 200 millones de dólares.

 

 

 





 

Uno de los proyectos más importantes para el estado Falcón durante el gobierno de Hugo Chávez, fue la mejora al sistema eléctrico. Hasta llegó a prometer que la entidad, ubicada al occidente de Venezuela, se convertiría en una isla eléctrica para que no dependiera del Sistema Eléctrico Nacional (SEN), esto con la puesta en marcha del Parque Eólico y la Planta Termoeléctrica Josefa Camejo. A más de 20 años de la revolución y sus promesas incumplidas, en la región falla la energía eléctrica todos los días. De hecho, existen municipios donde pueden durar hasta más de una semana sin luz.

Corresponsalía lapatilla.com

En 2008, Chávez anunció la incorporación de 1.335 megavatios al SEN como uno de los logros más importantes de los proyectos de generación eléctrica que se desarrollaban a corto y mediano plazo. Para ese entonces, destacó que la capacidad de generación eléctrica del país era de 22.400 megavatios y la generación efectiva se situaba en 17.500, por lo que era necesario atender los problemas generados como consecuencia de la desinversión del sector por más de 20 años.

Entre los proyectos estructurales, destacó la inauguración de la Planta Termoeléctrica Josefa Camejo, en la Península de Paraguaná, la cual generaría 450 megavatios para cubrir la demanda regional y así aliviar la presión sobre la Central Hidroeléctrica del Guri, que es la principal surtidora del Sistema Eléctrico Nacional.

Pero este proyecto no fue suficiente. Así que se comenzó a invertir recursos en el Parque Eólico, que prometía una energía limpia gracias a los vientos del municipio Los Taques. Con esto, Falcón sería una isla eléctrica que no dependería del Sistema Eléctrico Nacional. El proyecto tenía estimado 72 aerogeneradores, de los cuales se interconectaron solo 23 en el año 2012, siete años después de que se iniciaron los estudios de factibilidad y se aprobaron los primeros recursos.

El mega proyecto tuvo una inversión de 200 millones de dólares. Sin embargo, no avanzó, y en los últimos dos años el gobernador de Falcón, Víctor Clark, ha anunciado su recuperación en varias oportunidades. Pero sus palabras se las llevó el viento.

Dependencia total

El Sindicato Eléctrico del estado Falcón informó que la región sigue dependiente del Sistema Eléctrico Nacional, ya que la Planta Termoeléctrica Josefa Camejo, solo genera de 70 a 90 megavatios diarios, mientras que el Parque Eólico solo aporta 8 megavatios, según los reportes de Pdvsa.

“No nos consta porque no tenemos competencia directa sobre el Parque Eólico, que es una obra que maneja Pdvsa. Paraguaná depende de la Josefa Camejo, que cuando se dispara, deja sin luz a toda la península, mientras que los otros 22 municipios del estado se alimentan del SEN”, dijo Starling Bracho, secretario general del Sindicato Eléctrico en Falcón.

Las torres en el municipio Falcón se parten como galletas y repararlas lleva hasta una semana.

 

 

 

 

 

 

Las fallas que a diario registra el sistema eléctrico en la entidad se debe a que cualquier eventualidad como son las lluvias, el calor o la salinidad afectan al sistema de distribución y transmisión que no ha recibido mantenimiento preventivo y correctivo por más de 20 años.

“Se ponen pañitos de agua tibia y solo al pasar por la carretera Coro- Punto Fijo se puede ver cómo está la línea 115 Isiro – Punto Fijo, así como la línea Judibana – Pueblo Nuevo, que aunque le hayan hecho unas cositas, no es lo que realmente se necesita en esas áreas, y es lo que afecta la energía específicamente en el municipio Falcón, declarado en emergencia a principios de año por su actual alcalde Harold Dávila, debido a que las torres de alta tensión se caen a diario y con ello el municipio queda hasta una semana sin luz”.

Sin recursos

El sindicato denunció que la capacidad de respuesta a las comunidades es casi nula. Un ejemplo de eso es el municipio Miranda, donde solo hay un vehículo atendiendo una jurisdicción tan extensa. También deben acudir a los sectores foráneos como Mitare y Río Seco, subiendo la Sierra atiende hasta la Chapa y a veces apoyan a los municipios Colina, Zamora y Cumarebo.

“En esta situación se encuentra todo el estado. No contamos con una capacidad de respuesta, no contamos con todos los vehículos necesarios ni materiales para atender. Está la mano de obra calificada, pero está golpeada con salarios que no alcanzan para cubrir sus necesidades. Los trabajadores tampoco cuentan con los implementos para evitar accidentes, y los que existen ya cumplieron su vida útil”, dijo Bracho.

En el estado Falcón son 1.200 trabajadores activos y 400 jubilados que no recibe adiestramiento ni implementos básicos para laborar, además están sometidos a remendar los daños que se generan en las subestaciones, donde hay equipos que ya cumplieron su vida útil y otros están dañados por falta de mantenimiento preventivo y correctivo. Ante esta precariedad, remiendan y empatan para poder dar energía eléctrica a las comunidades.

“Es un sector eléctrico que está cada vez peor y en decadencia. No hay nadie que solucione estos problemas, nosotros seguimos exigiendo a las autoridades a que atiendan los problemas de los trabajadores. Ahora se quiere decir que los últimos problemas laborales que han ocurrido, se les quiere echar la culpa a los trabajadores, pero todos sabemos en qué andan laborando nuestra gente”, concluyó.