William Anseume: La zona económica especial de la guerrilla colombiana

Hasta ahora aprueba la Asamblea Nacional espuria de Nicolás Maduro y su combo del terror la Ley de Zonas Económicas Especiales. Sin embargo, ya esos espacios con sus empresas llevan rato largo en Venezuela ejecutándose sin ley que los ampare. Ya existen territorios cedidos, esqueletos de empresas cedidos, para que arriesgados inversores extranjeros con la ayuda de algunos venezolanos monten sus negocios en nuestra nación. Por ejemplo, la disidencia de las FARC o el ELN, la guerrilla colombiana.

Los iraníes son otros que se han pegado a Venezuela con mucho afán de invertir, tanto así que en Argentina siguen chequeando un avión rodeado de misterio tanto como de aguda sapiencia acerca de su contenido humano, de su tripulación. El avión según lo que se sabe y lo que se puede saber, filtrado por órganos de seguridad paraguayos, uruguayos, americanos, chilenos, argentinos e israelíes, es propiedad venezolana con origen iraní, es como una volandera zona económica especial. De este modo Conviasa, en cualquier territorio, se suma al proyecto de ley finalmente aprobado por la ilegítima AN de Jorge Rodríguez. Pero los iraníes no solo invierten en la zona económica especial aérea, también las tienen terrestres: al parecer -todo hay que someterlo a la duda en un país carente de certezas y de dinero- cansados ya de enviar petróleo, gasolina y gasoil desde tan lejos para los panas que dirigen a juro a la nación venezolana, se apropiaron de El Palito. La refinería quiero decir, según circuló por los problemas con los trabajadores y la presencia iraní en esa zona especial. Son dueños también de farmacias en este territorio andante y, muy seguramente, de otros negocios no muy bien vistos por la sociedad occidental.

Pero quienes sí tienen tiempo apropiados de su zona especial económica son los guerrilleros colombianos. Están zonificados en casi todo el país con sus negocios tan productivos, vinculados a los estupefacientes y las armas, sus especialidades. Aunque la zona que le apartaron es la fronteriza: Bolívar, Amazonas, Apure, tienen entrada en Guárico, en Tachira, en Mérida, estos dos últimos también fronterizos, y hasta en la propia Caracas, según las informaciones que llegan de afuera, las más variadas y creíbles o las internas, como las que generó el profesor Javier Tarazona y que lo tienen ya a un año de prisión, dado que dijo los puntos exactos del funcionamiento y el establecimiento de las zonas económicas especiales de los guerrilleros colombianos. Esto debido a que ya sabemos no solo que tenemos los teléfonos pinchados por Movistar para el régimen del terror sino que hace unas horas un dirigente del PSUV aclaró que eso de la libertad de expresión tiene sus límites. Otra zona económica muy especial esta de la información.





Lo cierto es que desde Colombia y los Estados Unidos llevan tiempo advirtiéndonos de la zona económica especial que tienen montada fija y portátil los guerrilleros colombianos en Venezuela. Así lo ha expresado, con mucha claridad, Iván Simonovis. Habló del 23 de enero como “refugio” de algunos de ellos. Pero bien, en Apure aparecieron minas antipersonas, porque ellos cuidan de un modo peculiar sus empresas, a las que nadie puede acercarse, entre otras cosas porque se pueden consumir el producto con solo olerlo. Son cuidadosos y sus empresas son muy productivas porque en la gestión de Donald Trump se detuvieron varios submarinos pequeños, muy rápidos ellos, que no valen cuatro lochas, como se decía aquí antes de la llegada del dinero virtual que es mejor no verlo porque también se desaparece.

De este modo, secreto, en sus zonas económicas especiales, han matado ya a cuatro líderes guerrilleros colombianos en territorio venezolano, ante la mudez absoluta del régimen que los cobija. A estas alturas nadie tiene mayor certeza, sino por unos audios que dan cuenta de presencia de la disidencia de la FARC y del ELN en un supuesto atentado a Iván, de la muerte del dirigente guerrillero y empresario especial. Pero Santrich, Romaña y El Paisa cayeron en su negocio, en su especial zona económica otorgada por el régimen venezolano que está cediendo parte del territorio para la producción económica que permita enfrentar los ataques desmesurados del “bloqueo”, de las sanciones que son las que tienen, según ellos, en esta ruina feroz a Venezuela. Así que las zonas económicas especiales que se oficializan desde la AN espuria han estado hace años en funcionamiento sin que lo dijeran, porque sigue siendo un secreto el funcionamiento de esas empresas y esos tan especiales empresarios. Tanto así que hoy no sabemos si Iván Márquez está muerto o agonizante en una clínica caraqueña, como nos sopló un diario español.

¿Las aprobaron? Ya estaban en funcionamiento.