Un viaje de cumpleaños a Fort Pierce para practicar el surf, se convirtió en una experiencia adorable para la familia Blais. El pasado 4 de julio, Lisa y Brandon Blais (junto con los padres de Brandon) llevaron a sus hijos mellizos, Evan y Logan, a Fort Pierce para celebrar los once años de los niños con un poco de surf y sol, cuando un manatí le pegó a la tabla de surf de Evan.
Por El Nuevo Herald
“El manatí que se acercó a la tabla de Evan terminó frente a la cámara de mi esposo”, dijo Lisa. “Mi esposo dijo: “¡Oh, oh, aquí viene!”. Y entonces, el manatí se acercó a Evan”. El manatí era uno de por lo menos otros tres que ese día nadaron junto a la familia Blais, provocando la alegría de los chicos y de sus padres. La familia Blais visita con frecuencia Fort Pierce para disfrutar de las grandes olas. “Mi esposo lleva surfeando desde hace unos 20 años”, dijo Lisa. “Casi siempre venimos a Fort Pierce”.
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Ese día, Evan y Logan fueron a la playa temprano con su padre. Lisa y su pequeña hija, Taylor, llegaron algunas horas después, a alrededor de las 9 a.m.
“Mis suegros estaban en el agua con los niños, y entonces vimos esos grandes objetos en el mar y pensé que eran tiburones”, dijo Lisa. Afortunadamente no eran tiburones, y la familia no tardó en darse cuenta de que era un grupo de manatíes.
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