Mar 2, 2016. REUTERS/Marco Bello
Envíos recientes de crudo iraní enviados para su procesamiento en la refinería El Palito de 140.000 b/d de capacidad de Pdvsa, como parte de un acuerdo energético entre Caracas y Teherán, causaron problemas operativos que requirieron que el crudo fuera procesado en el Centro de Refinación Paraguaná (CRP) del oeste de Venezuela. complejo, dijeron las fuentes a Argus.
Por Carlos Camacho en Argus Media | Traducción libre del inglés por lapatilla.com
La refinería El Palito tuvo muchos problemas para manejar el crudo iraní en parte porque era demasiado ácido, dijo el sindicalista exiliado Iván Freites, con problemas centrados en las operaciones de la torre de destilación.
“Entonces optaron por enviar el crudo a CRP, y ahí es donde lo están procesando”, dijo.
Otra fuente dijo que el crudo iraní causó problemas en El Palito durante muchos días antes de la transferencia al CRP.
Pdv se negó a comentar.
El crudo iraní tiene una gravedad de aproximadamente 28° API, que es más liviano que el grado Merey de 16,2° API de Venezuela. La acidez fue un problema principalmente debido a la falta de mantenimiento en El Palito, según otra fuente, particularmente debido a la corrosión descontrolada.
Irán firmó un acuerdo a principios de mayo para suministrar equipos de refinería a Venezuela y ayudar con las reparaciones en El Palito. El país ha estado enviando tanto diluyente para mezclar con el crudo pesado de Venezuela como crudo iraní para refinar.
Desde el acuerdo El Palito ha enfrentado problemas laborales
Cientos de trabajadores venezolanos de Pdvsa han sido despedidos y reemplazados por trabajadores extranjeros, incluidos iraníes, según los sindicatos.
La industria petrolera de Venezuela también ha sufrido accidentes importantes y, a veces, fatales en los últimos años, incluida una explosión masiva en la refinería Amuay de CRP en 2012 que mató a decenas, y un incendio en el centro de un gasoducto clave hace tres semanas.
El gobierno suele culpar de esas acciones a los “terroristas”, mientras que los críticos y analistas señalan la falta de inversión y los problemas de mantenimiento.