Pensó que su hija estaba enferma por comer dulces, pero médicos le detectaron un tumor cerebral

Pensó que su hija estaba enferma por comer dulces, pero médicos le detectaron un tumor cerebral

La madre pensó que su hija enfermó por comer muchos caramelos

 

Una madre, de Reino Unido, pensó que su hija pequeña se había atascado de dulces durante la fiesta de cumpleaños de uno de sus familiares, no obstante al acudir al hospital se enteró de que la niña sufría de un tumor cerebral canceroso.

Por El Heraldo 





La madre de la menor se identificó como Belinda Bryant, de 30 años. Según su testimonio llevó a su hija Lexi a la fiesta de sus primas gemelas el 17 de abril, tras el evento la menor vomitó. “Pensé que se había atascado de dulces y comida, porque los niños tienden a darse el gusto en las fiestas”, dijo Bryant, residente en el Reino Unido, a medios locales.

Sin embargo, la aparente enfermedad de Lexi continuó durante varios días, lo que llevó a la madre preocupada a llevar a su hija al médico. Bryant comentó que pese a visitar a los especialistas por más de 20 veces durante seis semanas, los doctores enviaron a su hija a casa, donde Lexi seguía enfermando sin un diagnóstico certero.

 

“Lexi estaba constantemente enferma y nada se desplomaba”, dijo la madre. “Comenzó a sentirse realmente cansada, simplemente dormía todo el tiempo y se iba cuesta abajo”, añadió.

Tras constantes visitas al hospital, el 6 de junio los médicos realizaron una tomografía computarizada y descubrieron que la menor tenía un tumor cerebral.

“Es muy agresivo y pone en peligro su vida. Lexi tiene un 50% de posibilidades de sobrevivir”, dijo Bryant tras recibir el diagnóstico de su hija. “Es desgarrador escuchar eso como su madre”.

 

Apenas la semana pasada, Lexi comenzó quimioterapia y radioterapia intensivas, y el tratamiento duraría seis semanas. Luego, la menor tomará un descanso de dos meses antes de regresar al hospital para la quimioterapia mensual, detalló su madre.

La mujer también aseguró que espera que su historia sirva como una advertencia para que otros padres estén atentos a cualquier síntoma persistente y preocupante que sus hijos estén experimentando.