En al menos ocho años los gobernantes del chavismo que han pasado por la silla municipal no han volteado su mirada hacia la vía de Sabana Arriba, en Miranda, estado Carabobo, que se ha convertido en una guillotina para los conductores.
Por Corresponsalía
Según contó José Arteaga, habitante de Miranda, el camino entre Laguna Verde y la subida de Portachuelo, unos 50 metros está plagado de huecos, lo que representa un peligro para quienes transitan por esta vía.
Hay huecos de lado y lado, de todos los tamaños, y en el intento de esquivarlos para evitar daños mayores a sus vehículos o incluso caerse en el caso de los motorizados, los conductores invaden el carril contrario, lo que pudiera desencadenar un trágico accidente.
El desafío está en tomar esta vía de noche, ya que según dijeron los conductores, está en completa oscuridad, y en esta temporada de lluvia el reto es aún mayor, pues la visibilidad del camino en horas nocturnas es casi nula.
El pésimo estado de la vialidad preocupa a los usuarios y habitantes de los sectores aledaños, quienes hicieron un llamado a la autoridad municipal, así como al gobernador de Carabobo para que visiten estas comunidades y conozcan de cerca los problemas que los afectan desde hace muchos años.
