Productores exigen más de 400 dólares por tonelada de maíz a la agroindustria

Productores exigen más de 400 dólares por tonelada de maíz a la agroindustria

 

Productores agropecuarios sostuvieron un encuentro en Valle de la Pascua, municipio Infante del estado Guárico, junto a directivos de asociaciones del agro, donde reafirmaron la posición de exigir a la agroindustria un pago justo por el maíz venezolano.





Por Pedro Izzo / Corresponsalía lapatilla

Julio Manuitt, directivo de la Confederación de Asociaciones de Productores Agropecuarios de Venezuela (Fedeagro), exigió respeto al sector agroproductivo y aseguró que el precio por tonelada del maíz venezolano debería estar sobre los $450.

“Nos merecemos un precio justo, no es posible que la primera empresa de nuestra Venezuela nos haya salido con una cachetada implementando un precio de 360 dólares por tonelada de nuestra producción”, rechazó.

Manuitt cuestionó que el precio del maíz importado sea mayor al que producen en Venezuela: “El maíz importado tiene un rendimiento a la hora del trillado de un 50%, 60%; nuestro maíz nacional es clase A y no es posible que tenga un menor precio que el maíz internacional de clase B”.

El directivo de Fedeagro recordó que Guárico es el primer estado productor de cereal: maíz blanco, maíz amarillo y arroz. Aclaró que de no llegar a un acuerdo con la agroindustria, esto podría significar una debacle para muchos productores agrícolas.

Entretanto, Luis Prado, vicepresidente de la Federación Nacional de Ganaderos (Fedenaga), manifestó apoyo absoluto a los productores de maíz y señaló que la ganadería también se ve afectada con los precios actuales del maíz.

“La vocación de nuestras unidades de producción es de doble propósito. Sembramos durante el invierno cereales y durante el verano, en esos desechos de las cosechas pastorean nuestros animales”, explicó Prado.

Por último, destacó que al no recibir un precio justo por el maíz, se ve comprometida toda la inversión que comprende el mantenimiento de las unidades de producción y los compromisos económicos con los trabajadores del campo.