Primitivo Cedeño y Oscar Novoa quitaron todo el alumbrado público a las avenidas de la ciudad de Guanare, con la intención de encenderlas en la celebración de sus 431 años, este 03 de noviembre.
Las avenidas de toda la ciudad, llevan semanas totalmente a oscuras, exponiendo a los ciudadanos y vehículos que transitan por estas vías al peligro, vandalismo, y salvajismo.
Esta estrategia de «encender las luces» de las avenidas, así como el encendido de luces navideñas, más la inauguración de una redoma que llevaba más de dos años en construcción, es parte del nuevo marketing de Primitivo Cedeño y de Óscar Novoa, en su afán de reivindicarse como los “gobernantes que sí hacen algo”.
Mantienen a la ciudadanía totalmente a oscuras durante semanas enteras, para luego encender las luces y crear sorpresas, entretenimiento y, una «notable diferencia» con años anteriores.
El pan y circo se reinventó con conciertos, inauguración de tiendas y el adelanto de la navidad. Lo único que no cambia es la falta de pan.
Todo este efecto podría parecer tonto, pero es bastante malicioso; está bien planificado. Estos tipos son inútiles para gestionar y resolver problemas que afectan, pero son expertos en burlarse de la ciudadanía. Llevan más de 20 años en lo mismo.
Con este nuevo «pan y circo, pero sin pan» pretenden que los guanareños olviden: los centrífugas dañados en el banco de sangre; que la semana pasada murió un niño en el Hospital Universitario Dr. Miguel Oraá por falta de ambulancias y suero antiofídico; que nunca han dado rendición de cuentas de la plata que se “chaparon” construyendo la redoma por más de 2 años, sin contar la que se han «chupado» todo el tiempo que llevan usurpando el poder. Pretenden que nuestros ciudadanos olviden que Guanare es uno de los municipios con impuestos más altos del país, con unos servicios básicos paupérrimos, escuelas y liceos deteriorados, la economía informal aumentando cada vez más sin ningún tipo de seguridad y estabilidad, sin planificación urbanística, y un sinfín de políticas malintencionadas que solo demuestran que tenemos un régimen inútil e indolente.
¿Come la ciudadanía con luces de navidad? ¿Las luces y adornos devolverán la vida de ese inocente que murió por falta de suero antiofidico? ¿Las comunidades se aliviarán del azote de consejos comunales que chantajean con el gas y la bolsa del clap? ¿Devolverán la libertad de expresión que poco a poco han ido socavando junto a los medios escritos, radios, y televisoras?
La Capital de Portuguesa no olvida lo que el régimen socialista ha destruido. Por ello, la necesidad de cambiar este modelo de miseria, inicia por lograr la salida de estos individuos que no saben gestionar, que no respetan los derechos humanos, y que son indolentes ante los problemas que sufren los habitantes.
El cambio de modelo debe plantearse:
1) Descentralización: que sea Guanare la que tome sus propias decisiones, que sean los propios guanareños los que discutan y decidan lo que debe hacerse en el municipio en pro de su desarrollo.
2) Libre Mercado: una economía abierta, justa y abundante, donde los productores, comerciantes y empresarios puedan producir sin trabas, mientras los consumidores puedan escoger el producto de su preferencia al mejor costo y mayor calidad. Históricamente está comprobado que las economías abiertas y libres, con reglas claras, impuestos mínimos y seguridad jurídica, generan mayor empleo, riqueza y bienestar en la sociedad.
3) Libre Desarrollo: sin libertad individual no hay prosperidad. Para lograr una Guanare próspera, moderna y ejemplar, es primordial que el ciudadano logre desprenderse de todo el monstruo estatal que coarta y limita el desenvolvimiento los guanareños. Nuestra Capital debe convertirse en el refugio de la meritocracia, inteligencia, excelencia, el arte y los valores que nos permita convertir nuestros sueños en logros, y principalmente, en el sustento propio y de nuestros seres queridos.
Guanare cuenta con un potencial enorme para convertirse en la Capital ejemplar de Venezuela e, inclusive, de la región. Cuenta sobre todo, con lo más importante: el recurso humano que ama a esta tierra, y que siempre busca sobreponerse a las adversidades.
Nuestra meta es lograr una Guanare liberal y capitalista, y lo vamos a lograr.