El “reventón” del Barroso 2, el pozo que hace 100 años reveló el potencial petrolero de Venezuela

El “reventón” del Barroso 2, el pozo que hace 100 años reveló el potencial petrolero de Venezuela

CORTESÍA PDVSA

 

“¡Míster Brake!, ¡Míster Brake!”.

Por: BBC





Hace justo un siglo estos desesperados gritos de unos trabajadores de la petrolera anglo-holandesa Shell a su capataz fueron el anuncio de un suceso que terminaría cambiando la faz de Venezuela para siempre.

De manera accidental se halló un enorme yacimiento petrolífero, el cual colocó al país suramericano en el mapa mundial y transformó radicalmente su economía en cuestión de pocos años.

Con motivo del aniversario BBC Mundo conversó con historiadores, economistas y expertos petroleros para hacer un repaso de este acontecimiento poco conocido y de sus consecuencias, no solo para Venezuela sino incluso para el mundo.

Lluvia negra

A las 4:30 de la mañana del 14 de diciembre de 1922, los habitantes del pequeño caserío de La Rosa, de la entonces depauperada localidad de Cabimas, al occidente del país, se despertaron sobresaltados por un temblor, al que siguió un estruendo.

En 2014, las autoridades venezolanas reinauguraron un monumento que en los años 80 fue edificado sobre el mismo lugar donde se produjo el llamado “reventón”.

Las crónicas de la época aseguran que más de un vecino pensó que se trataba de un terremoto o de una explosión causada por un grupo de extranjeros que desde hacía meses pululaban por la zona, abriendo huecos en el suelo en una hacienda cercana.

Sin embargo, al salir de sus casas los locales pronto se dieron cuenta de que otra cosa había pasado. Fueron testigos de un hecho no visto jamás en por aquellas tierras. Llovía, pero no era agua lo que caía del cielo, sino un líquido negro y viscoso. Petróleo.

Al mirar hacia la hacienda “Los Barrosos” los habitantes presenciaron algo aún más inusual: Una columna oscura se alzaba unos 40 metros de altura cual geiser.

“Diez días tardaron los trabajadores de la Shell en controlar la potencia del chorro con una válvula. El pozo estuvo arrojando unos 100 mil barriles diarios de crudo sin control, que se terminaron desperdiciando, pero que revelaron el tamaño del yacimiento”, afirma el historiador Rafael Arráiz Lucca.