Aunque fue capturado en Caracas, Venezuela, y tiene un proceso pendiente, Gabriel Carlos Luis Salinas Mendoza, señalado sicario que habría participado en el homicidio del fiscal paraguayo Marcelo Pecci, no será extraditado a Colombia.
Por eltiempo.com
Así lo informó este miércoles el general Henry Sanabria, director de la Policía Nacional, quien entregó detalles sobre la captura de este hombre, señalado del crimen ocurrido en mayo en las playas de Barú, en Cartagena.
“La Policía Nacional fue informada de la privación de la libertad de Salinas. Fue capturado la noche anterior en Caracas, con base en información de la Fiscalía General de la Nación”, contó Sanabria.
De acuerdo con la Policía, Salinas, sobre quien pesaba una circular azul de Interpol, fue ubicado en el área metropolitana de la capital venezolana y era buscado por la justicia por los delitos de homicidio agravado y tráfico de armas y municiones agravado.
La institución añadió que una vez conocida la retención del presunto sicario, se notificó a la Fiscalía Primera Delegada ante el Tribunal de Bogotá.
“Las autoridades competentes adelantan las coordinaciones correspondientes, a través de los mecanismos de cooperación judicial internacional, con el propósito de definir la situación jurídica del ciudadano venezolano”, se lee en un comunicad de prensa de la institución.
Sin embargo, el general Sanabria indicó que aunque el hombre está privado de la libertad, una vez se le condene no podría ser extraditado debido al ordenamiento constitucional del país vecino.
El abogado Francisco Bernate, que representa a los familiares del fiscal Pecci en los procesos judiciales en Colombia, explicó que Salinas Mendoza no será extraditado “por cuanto la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela de 1999, en su artículo 69, expresa que se prohíbe la extradición de venezolanos y venezolanas”.
Salinas, de nacionalidad venezolana, estaba prófugo desde mayo, cuando huyó de Cartagena tras el asesino de Pecci, quien se encontraba de luna de miel con su esposa.
En medio de las investigaciones por este homicidio la Fiscalía ha asegurado que Salinas fue quien condujo el jet ski en el que llegaron a la playa de Barú los sicarios que acabaron con la vida del funcionario internacional.
En Colombia, la justicia ya condenó por el homicidio de Pecci a otros cuatro implicados en el crimen: Cristian Camilo Monsalve, Eiverson Zabaleta, Wendre Still Scott y Marisol Londoño Bedoya. Scott fue quien disparó en contra del fiscal que estaba en Barú de luna de miel con su esposa y quien huyó junto a Salinas.
Igualmente, está en juicio Francisco Luis Correa Galeano, quien ha sido considerado por la Fiscalía como el articulador del crimen del fiscal antimafia y quien se declaró inocente de los cargos de homicidio agravado y fabricación, tráfico y porte ilegal de armas que le fueron endilgados.
Fuentes de la investigación le han explicado a este diario que Correa le ofreció 190 millones de pesos a cada uno de los sicarios (Wendre Still Scott y Gabriel Carlos), de los cuales se hizo un primer pago de 80 millones de pesos, 40 para cada uno, en Medellín. Y el resto, dijo la fuente, se entregó después del crimen a Gabriel Carlos, quien huyó luego con ese dinero.
Pecci y su esposa fueron seguidos desde su llegada a Colombia, actividad que fue acordada en Medellín y que quedó a cargo de Cristian Monsalve y Marisol Londoño, mientras que, según la Fiscalía, Correa tenía la labor de “coordinar el arma de fuego, la consecución del dinero y los equipos celulares”.
En este caso, los investigadores apuntan a que la orden de asesinar a Pecci se habría hecho desde Paraguay por un grupo de narcotraficantes que tendría nexos con el cartel del Brasil llamado ‘Comando Capital’ y que, a su vez, estaría reclutando gente del ‘Tren de Aragua’.
En noviembre pasado y tras una reunión con el presidente de Paraguay, Mario Abdo Benítez, el embajador de Estados Unidos en ese país, Marc Ostfield, anunció una recompensa de 5 millones de dólares por información que lleve a las personas que conspiraron para el asesinato del fiscal.
“Marcelo Pecci encarnó el trabajo duro, la perseverancia y la honestidad. Comprometido con el Estado de derecho, buscó incansablemente hacer justicia para los paraguayos”, dijo Ostfield en su momento.