Disidencias de las Farc liberaron a un secuestrado a unos pasos de Venezuela

Foto: @RandyCorreaVE / Twitter

 

 

Un grupo de las disidencias de las FARC dejó en libertad en el departamento colombiano de Norte de Santander, fronterizo con Venezuela, a un joven de 25 años que estuvo en su poder más de un mes, informó este miércoles la Defensoría del Pueblo de Colombia.





Darío Coronel Pineda, que estaba secuestrado por el Frente 33 de las disidencias de las FARC desde el pasado 2 de diciembre de 2022, fue entregado en una zona montañosa de la región del Catatumbo a una misión humanitaria conformada por la Defensoría del Pueblo, la Iglesia católica y la Personería de Hacarí.

La Defensoría dijo en un comunicado que una vez fue liberado el secuestrado “se facilitaron los canales humanitarios correspondientes para el reencuentro de Darío Coronel Pineda con sus familiares, tras un mes de cautiverio”.

El organismo reiteró su llamado a todos los grupos armados ilegales a que “sigan dando gestos de paz como esta liberación, que demuestran su disposición a participar de manera decidida en los diálogos que está adelantando el Gobierno nacional”.

Foto: @RandyCorreaVE / Twitter

 

Estas disidencias manifestaron, en agosto pasado, a través de un video su interés por hacer parte de “La paz total” que ha planteado el presidente colombiano, Gustavo Petro.

El Frente 33 de las disidencias de las FARC, que tiene fuerte presencia en el Catatumbo, está supuestamente liderado por alias “Jhon Mechas” y es autor de varios atentados como el de junio de 2021 cuando un carro bomba explotó en la sede de la Brigada 30 del Ejército en Cúcuta, en la que había personal militar de Estados Unidos, y resultaron heridas 36 personas.

También es el responsable del intento de atentado el 25 de junio de 2021 contra el helicóptero presidencial donde viajaba el entonces presidente Iván Duque (2018-2022) y dos de sus ministros, que salieron ilesos.

En el Catatumbo, que abarca 10.089 kilómetros cuadrados, en su mayoría selváticos, bandas criminales y grupos paramilitares como los Rastrojos, el Clan del Golfo o la disidencia del Frente 33 de las FARC también se pelean a muerte para quedarse con las rentas ilegales que dejan los cultivos de coca, la minería ilegal y la trata de personas, entre otras.

EFE