La ayuda se vuelca a los damnificados tras devastador terremoto en Turquía y Siria

La ayuda se vuelca a los damnificados tras devastador terremoto en Turquía y Siria

Varias personas caminan junto a los escombros de la histórica ciudad meridional de Antakya el 12 de febrero de 2023, después de que un terremoto de magnitud 7,8 sacudiera la región fronteriza de Turquía y Siria a principios de semana. (Foto de Yasin AKGUL / AFP)

 

Cientos de miles de personas sin hogar siguen pasando hambre y frío en Turquía y Siria, cuyas autoridades intentan afrontar el grave desastre humanitario causado por el terremoto que dejó más de 35.000 muertos.

Más de una semana después del sismo de magnitud 7,8, las esperanzas de encontrar personas con vida bajo los escombros se desvanecen y la atención se centra ahora en proporcionar alimentos y refugio a los damnificados.





Según el gobierno turco, cerca de 1,2 millones de personas han sido alojadas en campus universitarios, se han levantado más de 200.000 tiendas de campaña y 400.000 víctimas han sido evacuadas de las zonas devastadas.

La catástrofe del lunes pasado también ha tenido consecuencias psicológicas entre la población.

Serkan Tatoglu logró salvar a sus cuatro hijos del violento sismo que destruyó su casa en el sureste de Turquía. La familia se encuentra ahora segura, pero su hija de seis años no para de preguntarle: “Papá, ¿vamos a morir?”, contó este padre de familia de 41 años a la AFP.

Solo en Turquía, un total de 574 niños rescatados de entre los escombros se quedaron sin familia, según el vicepresidente de Turquía Fuat Oktay. Solo 76 pudieron ser entregados a familiares.

Una psicóloga voluntaria que trabaja en un centro de ayuda en la provincia de Hatay (sur) dijo que numerosos padres buscaban desesperadamente a sus hijos desaparecidos.

“Recibimos un aluvión de llamadas sobre niños desaparecidos”, dijo Hatice Goz. “Pero si el niño no habla aún, la familia no puede hallarlo”.

– “Millones” necesitan alimentos –

En la devastada ciudad turca de Antakya (sur), los equipos de limpieza siguen retirando los escombros e instlanado aseos básicos. La red telefónica empezaba a volver a funcionar en algunas partes de la ciudad, según un reportero de la AFP.

Policías y soldados patrullaban la ciudad para evitar saqueos tras varios incidentes ocurridos el fin de semana.

“Envíen todo lo que puedan porque aquí hay millones de personas y todas necesitan alimentarse”, suplicó el ministro turco del Interior, Suleyman Soylu, el domingo.

En Antakya y Kahramanmaras estaban llegando alimentos y otros suministros, según periodistas de la AFP.

El coste económico de la catástrofe podría ascender a más de 84.000 millones de dólares, de los que más de 70.000 millones corresponderían a la vivienda, estimó la federación de empresas Turkonfed en un informe el lunes.

La situación es también grave en la vecina Siria, ya asolada por más de una década de guerra civil.

La ONU celebró el lunes una reunión de urgencia sobre cómo aumentar la ayuda a las zonas bajo control rebelde.

El presidente sirio, Bashar al Asad, aislado y sujeto a sanciones, pidió ayuda internacional para reconstruir las infraestructuras del país, donde la ONU estima que más de cinco millones de personas se quedaron sin hogar.

El secretario general de la ONU, Antonio Guterres, dijo que Asad acordó abrir dos nuevos pasos fronterizos desde Turquía hasta el noroeste de Siria para permitir el ingreso de ayuda.

Antes del terremoto del 6 de febrero, casi toda la ayuda humanitaria crucial para los más de cuatro millones de personas que viven en las zonas del noroeste de Siria controladas por los rebeldes procedía de un solo paso fronterizo.

“La apertura de estos puntos de cruce, además de facilitar el acceso humanitario, acelerar las aprobaciones de visas y facilitar los viajes entre los centros, permitirá que entre más ayuda, más rápido”, dijo Guterres.

– Ayuda para Siria –

Más de una semana después del terremoto y contra todo pronóstico siguen surgiendo historias de personas encontradas vivas entre los escombros.

El lunes en Turquía los hermanos Harun, de ocho años, y Eyuphan, de 15, fueron rescatados tras pasar 181 horas sepultados, informó la agencia de noticias Anadolu.

El balance confirmado más reciente es de 35.331 muertos, 31.643 en Turquía y 3.688 en Siria, lo que convierte a este cataclismo en el quinto más mortífero desde el inicio del siglo XXI.

La cifra de muertos en Siria apenas ha variado en varios días pero seguramente aumente.

El lunes, camiones con kits de ayuda cruzaron desde Turquía al noroeste de Siria. Sin embargo, funcionarios de la ONU afirmaron que se necesita más ayuda para los millones de personas cuyos hogares quedaron destruidos.

Según el ministerio de Transporte sirio, hasta ahora han aterrizado en Siria 62 aviones con ayuda y se esperan más en los próximos días, sobre todo de Arabia Saudita.

Este martes un avión de Arabia Saudita con ayuda para las víctimas del terremoto aterrizó en Alepo, norte de Siria.

“Es el primer avión de Arabia Saudita que aterriza en Siria desde hace mas de diez años”, dijo a la AFP un responsable del ministerio de Transporte.

AFP