Murió un soldado en un atentando de las disidencias de las Farc en Colombia

Murió un soldado en un atentando de las disidencias de las Farc en Colombia

Soldados del Ejército de Colombia (REUTERS/Luis Jaime Acosta/Archivo)

 

 

El hecho ocurrió en la vereda Los Kioskos durante operativos rutinarios del Ejército en el occidente del Huila. Otro uniformado resultó herido.





Por infobae.com

Un soldado murió y otro resultó herido en un atentado con explosivos perpetrado por las disidencias de las FARC en una vereda en la vía que comunica los departamentos colombianos del Huila y el Cauca, en el sudoeste del país, informó este martes el Ejército en un comunicado.

El hecho ocurrió en la vereda (aldea) Los Kioskos durante operativos rutinarios del Ejército en el occidente del Huila, cuando una patrulla motorizada fue sorprendida por la activación de un artefacto explosivo, indicó el Ejército, que atribuye el atentado a la estructura ‘Dagoberto Ramos’, perteneciente al Estado Mayor Central comandado por ‘Iván Mordisco’.

La institución castrense consideró que esta acción “infringe los derechos humanos y las normas del derecho internacional humanitario” e informó que el suboficial que resultó herido fue trasladado a un centro asistencial en el que recibe atención médica.

El atentado se produce en medio de las denuncias de violaciones del cese el fuego bilateral firmado a principios de año entre las disidencias y el Gobierno colombiano, que está en la senda de una “paz total” y busca abrir conversaciones con los grupos armados que operan en el país.

De hecho, el Alto Comisionado para la Paz ya ha adelantado que el siguiente proceso de negociación de paz se iniciará próximamente con las disidencias.

Por el momento, la única mesa de negociación que se ha instalado es con la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN), que ya tuvo dos rondas de diálogos, una en Venezuela y la otra en México.

La Defensoría del Pueblo de Colombia alertó a comienzos de este año sobre la presencia de disidencias de las FARC en 237 municipios, ubicados en 29 de los 32 departamentos de Colombia.

Actualmente, la estructura ‘Dagoberto Ramos’ opera principalmente en el departamento del Cauca.

Rebeldes del Ejército de Liberación Nacional (REUTERS/Federico Ríos/Archivo)
Rebeldes del Ejército de Liberación Nacional (REUTERS/Federico Ríos/Archivo)

El ELN dejará en libertad a un sargento que secuestró en el este de Colombia

El máximo comandante del ELN, Eliécer Chamorro, alias “Antonio García”, aseguró este martes que la guerrilla dejará en libertad al sargento del Ejército Libey Danilo Bravo, quien fue secuestrado el pasado 14 de febrero en el departamento de Arauca, fronterizo con Venezuela y principal bastión de ese grupo.

“El sargento Libey Danilo Bravo, capturado por el ELN en Arauca, es un prisionero de guerra, se respeta su estatus de prisionero y sus derechos de víctima, tal como lo establece el DIH (Derecho Internacional Humanitario). Será liberado con vida y con respeto a su integridad y dignidad”, dijo García.

Sin embargo, el comandante del Ejército de Liberación Nacional aseguró que la muerte de combatientes a manos de “las Fuerzas Militares gubernamentales, en estado de indefensión”, en los departamentos de Valle del Cauca (suroeste) y Antioquia (noroeste) “son crímenes de guerra, violatorios al DIH”.

“Esperamos se hagan las investigaciones que dijeron se iban a realizar. Cada cosa por su nombre y no tantas vueltas”, añadió el guerrillero.

El domingo pasado, el Ejército confirmó el secuestro, que tuvo lugar el pasado 14 de febrero en Arauquita en horas de la tarde por hombres armados que interceptaron al sargento en el casco urbano “obligándolo a subirse a una camioneta con rumbo desconocido”.

“Este repudiable hecho es una violación a los derechos humanos e infracción a las disposiciones del Derecho Internacional Humanitario, así como un delito catalogado como crimen de lesa humanidad”, alertó el Ejército en un comunicado.

La institución castrense responsabilizó “por la seguridad e integridad física” del sargento al Frente de Guerra Oriental del ELN, a quien atribuyó el secuestro.

En ese sentido, el presidente Gustavo Petro consideró que el secuestro de Bravo es un hecho que “sabotea cualquier posibilidad de paz”.