El presidente ejecutivo de Petrobras, Jean Paul Prates, declaró el jueves que la petrolera estatal de Brasil debe estar lista para lo que denominó la transición energética “inevitable”, y agregó que Petrobras quiere ser una parte importante del proceso de transición.
Por Julianne Geiger en Oilprice.com | Traducción libre el inglés por lapatilla.com
Mientras la nación sudamericana busca expandir sus parques eólicos marinos, Prates enfatizó en una conferencia telefónica con inversionistas que las actividades en aguas profundas de Petroleo Brasileiro SA colocan a la empresa en una excelente posición para participar en la generación de energía eólica.
Pero Petrobras no se da por vencida con el petróleo y el gas.
“Mantendremos nuestro protagonismo en la producción de petróleo y gas mientras trabajamos para financiar y construir este nuevo futuro”, subrayó Prates, quien agregó que su objetivo era hacer de Petrobras una empresa equilibrada que pudiera ser líder en lo que respecta a la transición energética.
Prates solo ha ocupado su cargo de director general en Petrobras durante poco más de un mes.
Hoy temprano, Petrobras, al igual que sus pares internacionales, registró ganancias del cuarto trimestre que fueron significativamente más altas que en años anteriores. A pesar de las altas ganancias, la compañía propuso recortar sus generalmente altos dividendos debido a las presiones del gobierno.
Petrobras ya está trabajando con Equinor para construir los proyectos eólicos marinos Aracatu 1 y 2 frente a la costa del estado de Río de Janeiro que entregarán 4 GW de capacidad. El MOU para el proyecto se firmó en 2018.
También se dijo que otras compañías, como Shell, estaban buscando el camino de Brasil para la energía eólica.
El ex director ejecutivo de Petrobras, José Mauro Celho, compartió la opinión de Prates de que valía la pena investigar la energía eólica marina en función del hecho de que la energía eólica marina compartía similitudes con la exploración de petróleo en aguas ultraprofundas.
En 2021, sin embargo, Petrobras vendió su participación en los parques eólicos Mangue Second 1, 2, 3 y 4, en línea con su estrategia de optimización de cartera mientras intentaba reducir su fuerte carga de deuda y concentrarse en campos de petróleo y gas en aguas ultraprofundas.