En máxima alerta se encuentran los integrantes de la Fuerza Pública de Colombia ante una eventual retaliación del ELN luego de la muerte en combate (martes) de alias Tuvia, de 50 años, uno de los históricos en el grupo guerrillero —llevaba 25 años en sus filas—. Era hombre de confianza del Comando Central (Coce) y financiero del grupo armado organizado.
Por EL TIEMPO
‘Tuvia’, cuyo nombre de pila está por establecerse, fungía como jefe del frente de guerra ‘Darío Ramírez Castro’, con injerencia en el sur de Bolívar, Bajo Cauca antioqueño y nordeste de Antioquia, con mando sobre unos 400 hombres en armas, que hacen parte de 10 frentes, 4 compañías y una célula urbana.
Pero para las autoridades, el verdadero poder de ‘Tuvia’ en el Eln es la parte financiera, ya que era el encargado de recaudar y enviar cada mes al menos 15 libras de oro, de 24 quilates, a los jefes guerrilleros que se refugian en Venezuela.
“‘Tuvia’ enviaba el oro en mulas o carros a través del sur de Bolívar para ingresar por la frontera al estado Zulia; allí, sus emisarios lo entregaban a los jefes, quienes a través de terceros lo vendían en las casas de compra donde se paga en promedio 64 dólares por gramo”, le dijo a EL TIEMPO uno de los enterados del caso de la Policía Nacional de Colombia.
En ese afán de obtener el oro, ‘Tuvia’, desde que fue nombrado jefe del frente de guerra, ha sostenido 9 combates —que han generado el confinamiento de 250 personas y el desplazamiento de 107 familias entre el sur de Bolívar y el Bajo Cauca—, que dejaron 9 muertes de lado y lado.
Esta situación, señala el investigador, generó temor entre los pobladores, y más por el reclutamiento de menores de edad, especialmente de adolescentes, a las que convertían en sus compañeras sentimentales.
“Fue así como una de sus novias, que descubrió el engaño de ‘Tuvia’, se comunicó vía celular con una amiga para contarle la situación y la salida de un correo humano para el abastecimiento del grupo, información que fue aprovechada por nuestro agente encubierto”, señaló el investigador.
Esa información fue corroborada por inteligencia, que identificó al correo humano. Tras varias semanas de labores de ubicación, infiltración y seguimientos, se pudo concretar el punto donde se establecería ‘Tuvia’ en Semana Santa.
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