Acusados de crímenes contra humanidad se fugan en pleno caos en Sudán

Acusados de crímenes contra humanidad se fugan en pleno caos en Sudán

ARCHIVO – El general Mohammed Hamdan Dagalo, dirigente del concejo militar, saluda a los presentes durante una marcha tribal respaldada por las fuerzas militares en el Estado Río Nilo de Sudán, el sábado 31 de julio de 2019. (AP Foto/Mahmoud Hjaj, archivo)

 

Un alto cargo del antiguo régimen islamista de Sudán, acusado de crímenes contra la humanidad, confirmó que escapó de la cárcel junto a otros en medio de los enfrentamientos que asolan el país, generando temores de que el conflicto se empeore tras un frágil alto el fuego.

Una tregua de 72 horas auspiciada por Estados Unidos entró en vigor el martes, pero quedó fragilizada después de que el ejército volviera a bombardear las fuerzas paramilitares en Jartum, la capital.





Ahmed Harun, un antiguo colaborador del exdictador Omar al Bashir depuesto en 2019 tras masivas protestas, confirmó el martes que un alto número de responsables del antiguo régimen huyeron de la cárcel de Kober.

Tanto Harun y al Bashir están buscados por la Corte Penal Internacional (CPI) por “crímenes contra la humanidad” y “genocidio” en la región occidental de Darfur, donde el conflicto que empezó en 2003 dejó 2,5 millones de desplazados, según la ONU.

Al Bashir, de 79 años, se encontraba también en la cárcel situada en Jartum, pero el ejército confirmó el miércoles que había sido trasladado a un hospital antes de que empezaran los choques el 15 de abril.

Junto a otros miembros de su régimen, fueron trasladados a un hospital militar “debido a sus condiciones de salud (…) y permanecen en el hospital bajo la vigilancia de la policía judicial”, aseguró el ejército en un comunicado, sin precisar la fecha del traslado.

Se trata de la tercera fuga de prisión registrada desde que empezaron los combates entre el ejército del general Abdel Fatah al Burhan, gobernante de facto de Sudán desde el golpe de 2021, y su rival, el general Mohamed Hamdan Daglo, líder de las paramilitares Fuerzas de Apoyo Rápido (FAR).

Los choques ya han dejado más de 459 muertos y más de 4.000 heridos en este país del noreste de África, según la ONU.

– Éxodo masivo –

“Nos quedamos en el centro de detención de Kober, bajo el fuego cruzado de esta batalla durante nueve días” y “ahora hemos asumido la responsabilidad de nuestra protección” en otro lugar, dijo Harun el martes en la televisión sudanesa.

Mientras los combates bajaban en intensidad en Jartum tras el anuncio de la tregua, las capitales extranjeras seguían evacuando a sus ciudadanos por tierra, mar y aire.

Un barco con 1.687 civiles de más de 50 nacionalidades llegó el miércoles a Arabia Saudita, informó el Ministerio de Relaciones Exteriores de Riad.

Mientras tanto, los sudaneses permanecen atrincherados en sus casas e intentan sobrevivir sin suministro de agua ni electricidad, con escasez de comida y cortes de internet y de teléfono.

“Le digo a Hemedti [nombre por el que se conoce al general Daglo, de las FAR], mi hermano, por favor, la guerra destruyó al pueblo sudanés. Mi hermano, Burhan, pon fin a la guerra”, declaró Barir Hamad, que trabaja en la construcción, a AFP.

“¿Por qué los oficiales no se preocuparon por el pueblo sudanés y su sufrimiento?”, se preguntó Alnur Mohamed Ahmed, otro trabajador. “La gente no puede salir de sus casas”, lamentó.

El martes por la noche, testigos informaron a AFP de nuevos bombardeos en el norte de Jartum contra vehículos de las FAR.

En un video, el grupo paramilitar también afirmó tomado el control de una refinería y de una central eléctrica 70 km al norte de la capital, de cinco millones de habitantes.

El ejército había advertido en Facebook de un “importante movimiento [de las FAR] hacia la refinería con el objetivo de aprovecharse de la tregua para controlarla”.

Ambos bandos afirman controlar lugares clave de la capital, pero estas no pueden ser verificadas.

– “Elevados” riesgos biológicos –

La Organización Mundial de la Salud advirtió el martes de “elevados” riesgos biológicos después de que uno de los beligerantes ocupara un laboratorio, donde hay agentes patógenos del sarampión, cólera y poliomielitis.

Otro informe de la ONU advirtió de que la escasez de comida, agua, medicamentos y combustible se estaba volviendo “extremadamente aguda, especialmente en Jartum y sus alrededores”.

“En algunos lugares, la ayuda humanitaria es la única que mantiene a raya la hambruna”, subrayó el secretario general del organismo internacional, António Guterres, el martes.

La ONU estima que hasta 270.000 personas podrían huir de Sudán a los vecinos Chad y Sudán del Sur.

Sudán tiene un largo historial de golpes militares. La disputa entre Burhan y Daglo, que se aliaron para derrocar a los civiles del poder en 2021, surgió de los planes de integrar las FAR al ejército regular.

AFP