SEMANA conoció datos del caso que, preliminarmente, se establece como un feminicidio ocurrido en Unicentro, en el norte de Bogotá, y que dejó como víctima a una mujer de apenas 26 años de edad, empleada de una pizzería en el mismo centro comercial.
La víctima fue identificada como Erika Aponte Lugo. Cumplía una cita con quien minutos después se convirtió en su asesino. Se trata de Cristian Rincón, un empleado de una empresa de seguridad que llegó armado al centro comercial y a la cita con Erika.
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Tras unos minutos de conversación y dicho por los testigos de este caso, el hombre sacó un arma y le disparó a Erika, luego se acercó a su cuerpo y con la misma arma de fuego se quitó la vida, frente a decenas de personas que, angustiadas y con el ánimo de protegerse, estaban tiradas en el suelo.
Aparentemente y son las versiones preliminares que tienen las autoridades, la víctima había decidido ponerle fin a la relación sentimental y el responsable del feminicidio la invitó a tomar un café, como excusa para dejarla en estado de vulnerabilidad con la posibilidad de atacarla, como lo hizo, de manera fría y con el arma de fuego que previamente cargó para cumplir la cita.
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