Ramón Peña: Lula III

Ramón Peña: Lula III

Iniciando su tercer gobierno, Luiz Inazio Lula da Silva es la figura noticiosa en la escena política del hemisferio. Se ha declarado nada menos que promotor de una nueva geopolítica que cambie la gobernanza del mundo. En su cruzada, aúpa que el denominado conjunto BRICS (Brasil, Rusia, India, China y Suráfrica), adquiera y ejerza un peso significativo dentro de un deseado multilateralismo y se convierta en eje de balance frente a EE.UU. y la Unión Europea. En materia financiera internacional, promueve un rol creciente del Banco BRICS, banco de inversiones, cuya presidencia la ejerce su discípula Dilma Rousseff, para que esta institución compita con el FMI y el Banco Mundial, y promueva transacciones en yuanes y otras monedas, como alternativa frente al dólar.

Con un claro propósito de protagonismo internacional y de hacer sentir que “Brasil ha vuelto”, como expresó al ser elegido, se ha postulado como paladín mediador y pacificador en el conflicto Putin-Ucrania. No obstante, en esta postura, movido por otros intereses, ha incurrido en dobleces, dependiendo de si su interlocutor es Xi Jinping o un líder occidental como Biden, Macron o Scholz. En todo caso, fiel a la tradición de la Cancillería de Itamaraty, ha declarado que Brasil es neutral en el conflicto. Tan neutral como China…

En general, Lula se empeña en demostrar una política exterior autónoma. Recordemos que, si bien con su primera visita al exterior privilegió a Washington, días después, salvaguardando la prioritaria relación de Brasil con China, afirmó que Taiwán no es un Estado independiente.





Queda entonces aún por ver cuál será su política en nuestro continente recordando que, junto a Fidel Castro, Lula fue creador del pendenciero Foro de Sao Paulo en 1990. Nos preguntamos si alentará las conocidas acciones desestabilizadoras de este cónclave. Asimismo, si reeditará vínculos económicos nada transparentes, y algunos escandalosos, como aquellos que forjó con el régimen “socialista” de Venezuela y otros gobiernos afines.