Académicos tachirenses: Excesivo centralismo entre Caracas y Bogotá obstaculiza desarrollo fronterizo

Académicos tachirenses: Excesivo centralismo entre Caracas y Bogotá obstaculiza desarrollo fronterizo

Académicos tachirenses: Excesivo centralismo de Caracas y Bogotá obstaculiza desarrollo fronterizo

 

 

El Centro de Estudios de Frontera Académico y Empresarial (Cefae), conformado por académicos del estado Táchira, ha llevado a cabo un análisis de la situación en la frontera entre la entidad andina y Norte de Santander, y ha ofrecido propuestas para el desarrollo de ambas regiones en el marco de diálogos y políticas públicas.





Anggy Polanco // Corresponsalía Lapatilla.com

Según Gerson Cárdenas, académico de la Universidad Nacional Experimental del Táchira (Unet), es importante abordar los problemas que enfrentan los productores de tabaco y los artesanos de marroquinería, así como investigar qué sucedió con la fabricación de zapatos y jeans en Cúcuta. Hace un llamado a superar la miopía y la individualidad.

El vicerrector de la ULA, Omar Pérez Díaz, destaca que las universidades del Táchira están estudiando el futuro de la zona fronteriza con el objetivo de lograr metas concretas.

Pérez señala que el problema no solo es económico, sino que también hay aspectos culturales, de salud, educación y falta de tratados y convenios en materia educativa. Observa que tanto Bogotá como Caracas están desconectadas de la realidad de los habitantes del Táchira y Norte de Santander.

Pavel Rondón, profesor de la ULA y exembajador venezolano en Colombia, explica que la presidencia de Gustavo Petro ha implicado un cambio en las relaciones entre Colombia y Venezuela. Durante los casi 200 días de Gobierno de Petro, han tenido cinco reuniones con Maduro sin resultados significativos. En comparación, Chávez tuvo más reuniones con gobiernos colombianos anteriores.

Rondón destaca varios problemas como el excesivo centralismo de Caracas y Bogotá, así como la xenofobia en ambos lados de la frontera, evidenciada en el trato a los taxistas. También menciona la falta de conocimiento de los líderes acerca de la dinámica en la frontera.

Otro aspecto importante es la ausencia de una tasa de cambio establecida, lo que genera dificultades en las transacciones monetarias.

En cuanto a la infraestructura vial, la carretera que conduce a San Antonio lleva 98 años sin mejoras. Además, no hay una clasificación clara para la zona fronteriza, lo que genera confusión e imprecisión.

En relación a la Zona Económica Especial (ZEE), Rondón menciona que solo se enfoca en leyes económicas especiales y no considera aspectos sociales. Desde 2014, la ZEE no ha funcionado debido a la falta de servicios públicos esenciales.

Existe un programa de la Zona de Integración Fronteriza (ZIF) que nunca se ha implementado, a pesar de que fue creado en 2001. Esta iniciativa contempla el apoyo y financiamiento para las empresas que operan en estas regiones.

Judith Medina, representante del sector empresarial, destaca la importancia de los datos recopilados por el Cefae, especialmente en los municipios Bolívar y Pedro María Ureña, donde existe una infraestructura empresarial destacada en comparación con otras zonas fronterizas.