Cómo una madre venezolana recuperó a su hijo, víctima de trata de personas en Trinidad y Tobago

Cómo una madre venezolana recuperó a su hijo, víctima de trata de personas en Trinidad y Tobago

Pescadores intentan buscar a víctimas del naufragio en el mar Caribe. FOTO: YURI CORTEZ / AFP

 

 

Laura estaba en una clínica de Trinidad y Tobago. Con apenas 7 meses de embarazo fue forzada a una cesárea. Con un matrimonio europeo radicado en la isla había acordado que el niño de la joven venezolana sería su hijo en adopción. Unos 2.500 dólares recibiría la madre.





Por Ana Rodríguez Brazón | EL TIEMPO

La mujer se había quedado sin pareja y la difícil situación del país le hacían pensar que no era buena idea traer un nuevo hijo, por lo que un médico en Caracas le indicó que existía la posibilidad de dar el niño en adopción, “que todo estaría bien” y sería seguro.

Laura – nombre ficticio para proteger la identidad de la madre- fue contactada por los “encargados” de este tipo de “negocios”, entre los que asegura hay ciudadanos de nacionalidad colombiana.

Le plantearon que primero iría a conocer a la familia en Trinidad para decidir si quería dar el niño. El viaje se dio desde el Aeropuerto Internacional Simón Bolívar de Maiquetía, pero al estar en la isla –que mantiene una estrecha relación con el gobierno de Venezuela- fue encerrada en una casa, ahí comenzó el calvario. Sin saber inglés las cosas se complicaron.

“Venezuela ha suscrito distintos pactos internacionales en los que debería cooperar y colaborar en cuanto a la prevención y la judicialización de casos de trata y explotación. Vemos como los últimos informes emitidos por la Oficina del Alto Comisionado para para las Naciones Unidas y también la anterior Michelle Bachelet se le han hecho distintas peticiones a Venezuela a que ponga el ojo en en materia de prevención, pero también en materia de judicialización”, le dice a EL TIEMPO, Gabriela Boada, coordinadora de la ong Caleidoscopio Humano.

Precisamente estos pactos y acuerdos no funcionaron. Fue la Comisión Interamericana de Derechos Humanos que otorgó medidas cautelares al hijo de Laura, que para 2019 tenía 15 meses de edad, de los cuales 12 había permanecido en una casa de albergue debido a todas las disputas legales que emprendió la madre en la isla, la cual ha prestado poco apoyo al caso.

Lea más en EL TIEMPO