La guerra en Ucrania está en su cuarto mes y no hay señales de que termine pronto. Ucrania ha estado luchando contra la invasión rusa con valor y determinación, pero necesita ayuda militar para tener éxito.
El asesor de la oficina de la presidencia ucraniana, Mijailo Podoliak, ha pedido a los países occidentales que proporcionen a Ucrania cientos de blindados, más sistemas de defensa aérea y aviones de combate F-16. También ha dicho que Ucrania necesita misiles de largo alcance para poder dañar las bases de logística de Rusia.
Podoliak ha criticado la lentitud inicial del apoyo militar occidental a Ucrania y ha dicho que si las entregas de armas se aceleran, el curso de la guerra también se acelerará.
En términos más generales, Podoliak ha asegurado que las operaciones militares de Ucrania no solo son “una contraofensiva, sino un ataque real”. Ha dicho que el ataque se está llevando a cabo de acuerdo con el calendario establecido previamente por el Estado Mayor.
Sobre las posibles negociaciones con Rusia, Podoliak ha opinado que en Moscú “no hay ningún liderazgo político que podría asegurar los compromisos asumidos”.
Sobre las tensas relaciones entre Ucrania y Hungría, el asesor de Zelenski ha afirmado que el primer ministro húngaro, el ultranacionalista Viktor Orbán, repite la propaganda rusa, cuando habla, entre otros, de detener los envíos de armas al país vecino.
El Gobierno húngaro, considerado el mejor aliado de Moscú en la Unión Europea, critica las sanciones comunitarias contra Rusia a pesar de haber aprobado hasta ahora todos los paquetes punitivos.
Podoliak ha dicho que las declaraciones del primer ministro húngaro son “muy perjudiciales” y que “no entiende lo que está sucediendo en el mundo y especialmente en la guerra. Está destruyendo los valores europeos comunes con sus declaraciones”.
Mientras que Kiev afirma que Hungría sigue los intereses rusos, Budapest acusa a Ucrania de no respetar los derechos de la minoría magiar de 150.000 personas que vive en el país vecino.
Podoliak ha asegurado que “Ucrania no viola los derechos de ninguna minoría” y ha agregado que “si hay necesidad de diálogo, debe llevarse a cabo. No creo que sea difícil encontrar una solución”.
Con información de EFE