En una sorprendente revelación destapada por la REVISTA SEMANA, se ha descubierto que el Gobierno colombiano liderado por Gustavo Petro ha ordenado llevar a cabo ciberataques y espionaje contra los regímenes de Venezuela, Nicaragua y Ecuador, considerándolos una amenaza.
El plan, detallado en un documento clasificado como “ultrasecreto”, instruye la recopilación de información en el ciberespacio.
Según SEMANA, dos militares experimentados recibieron la misión de lanzar ciberataques contra estos países, apodados “Viuda Negra“, “Nutria” y “Escorpión”, respectivamente, con el objetivo de contrarrestar cualquier amenaza contra Colombia.
A pesar de las recientes mejoras en las relaciones con estos países y el fallo pendiente de la Corte Internacional de Justicia sobre Nicaragua, el Gobierno colombiano ha decidido tomar medidas enérgicas.
Los documentos revelan que las órdenes fueron emitidas bajo el mando del Ejército y el Ministerio de Defensa, autorizando a agentes militares a llevar a cabo actividades de inteligencia y contrainteligencia para recopilar información estratégica.
El objetivo declarado es anticipar las actividades e intenciones de estas naciones, consideradas amenazas híbridas debido a las hipótesis de guerra Z-2 (Venezuela), Z-3 (Nicaragua) y Z-4 (Ecuador). Sin embargo, resulta curioso que las órdenes se emitieron mientras Iván Velásquez era ministro de Defensa, y las fechas coinciden con el periodo comprendido entre el 24 de febrero y el 29 de marzo de 2023.
El Ejército colombiano ha justificado los ciberataques y el espionaje como una medida necesaria para obtener información vital en el campo militar y contrarrestar amenazas potenciales.
Se ha enfatizado que los agentes de inteligencia están entrenados y capacitados en la normativa legal aplicable, así como en las tácticas y procedimientos de las operaciones de inteligencia.
El plan también incluye instrucciones estrictas para evitar fugas de información, prohibiendo el uso de aplicaciones de mensajería y dispositivos electrónicos, y ordenando la transmisión de resultados a través de canales seguros de inteligencia militar.
Es evidente que el Gobierno de Petro no confía plenamente en líderes como Maduro, a pesar de los viajes y la aparente simpatía entre ambos mandatarios.
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