Un distrito escolar de Florida prohibió los celulares y esto fue lo que ocurrió luego

Un distrito escolar de Florida prohibió los celulares y esto fue lo que ocurrió luego

Lyle Lake, agente de seguridad de la escuela secundaria Timber Creek en Orlando, Florida, patrulla en un carrito de golf durante la hora del almuerzo, en busca de alumnos que infrinjan la prohibición de utilizar celulares impuesta por el distrito escolar.Credit… Zack Wittman para The New York Times

 

Una tarde del mes pasado, cientos de estudiantes de la escuela secundaria Timber Creek de Orlando acudieron al extenso patio central del campus a pasar el rato y almorzar. Para los miembros de una generación demasiado conectada a internet, sus actividades eran decididamente analógicas.

Por The New York Times





Decenas estaban sentados en pequeños grupos, charlando animadamente entre sí. Otros jugaban al pickleball en canchas improvisadas a la hora del almuerzo. No había ni un teléfono celular a la vista, y no era casualidad.

En mayo, Florida aprobó una ley que obliga a los distritos escolares a imponer normas que prohíban a los alumnos utilizar el celular durante las horas de clase. Este otoño, el distrito de escuelas públicas del condado de Orange —distrito al que pertenece la secundaria Timber Creek— fueron aún más lejos, y prohibieron a los alumnos el uso de teléfonos durante toda la jornada escolar.

En entrevistas, una decena de padres y alumnos del condado de Orange dijeron en su totalidad que apoyaban las normas de no utilizar el teléfono durante las clases. Pero se oponían a la prohibición más estricta de su distrito, que dura todo el día.

Los padres dijeron que sus hijos deberían poder contactarse directamente con ellos durante las horas libres, mientras que los alumnos calificaron la prohibición de jornada completa como injusta e infantilizante.

“Esperan que seamos responsables de nuestras propias decisiones”, dijo Sophia Ferrara, alumna del último año en Timber Creek, que necesita utilizar dispositivos móviles en los periodos libres para tomar clases universitarias por internet. “Pero luego nos quitan la posibilidad de elegir y de aprender a ser responsables”.

Al igual que muchos padres exasperados, las escuelas públicas de todo Estados Unidos están adoptando medidas cada vez más drásticas en un intento de apartar a los jóvenes de sus teléfonos. Los legisladores y los líderes de los distritos argumentan que se necesitan restricciones más severas pues el uso desenfrenado de las redes sociales durante las clases amenaza la educación, el bienestar y la seguridad física de los alumnos.

Lea más en The New York Times