Quema de basura en las montañas de Táchira pone en riesgo el agua y la salud de los habitantes

Quema de basura en las montañas de Táchira pone en riesgo el agua y la salud de los habitantes

Quema de basura en las montañas de Táchira pone en riesgo el agua y la salud de los habitantes

 

 

 





El pulmón vegetal del estado Táchira, las montañas del municipio Sucre, están siendo contaminadas con desechos sólidos que posteriormente son quemados, debido a que las alcaldías de esta dependencia carecen de camiones que puedan transportar la basura al sitio de disposición final.

Anggy Polanco / Corresponsal lapatilla.com

Así lo denunció Fernando Andrade, dirigente de Copei en Táchira, quien manifestó que las alcaldías de los citados municipios ya no cuentan con la capacidad de tener camiones compactadores de basura que puedan llevar los desechos hasta Mancomunidad del Norte del Táchira (Manorta), sitio de deposición de la basura de 12 municipios de la entidad, ubicada en la zona norte de Táchira.

“¿Dónde está la capacidad de maniobra del Ministerio del Ambiente? ¿Dónde está la capacidad de maniobra del equipo de ecosocialismo y agua? Cuando en estas montañas nace el agua que alimenta el Acueducto Regional del Táchira, es increíble la irresponsabilidad del Gobierno nacional y de la gobernación del Táchira, que no haya prestado apoyo suficiente a las municipales”, aseveró Andrade desde cerca del sector La Nevera, municipio Sucre.

Andrade detalló que son varios los municipios de Táchira que presentan el mismo problema. Por ejemplo, en el municipio Lobatera están botando en plena autopista San Cristóbal – La Fría los desechos, que son quemados también permanentemente a cielo abierto, ocasionando afectaciones respiratorias en los residentes Lobatera y Michelena por la grave contaminación del aire.

Lo que sucede, explicó el exalcalde Michelena, que las alcaldías no tienen recursos porque el centralismo arrebató las competencias a las municipalidades y, por tanto, se encuentran sin recursos para mantener los camiones de basura, toda vez que además son pueblos pequeños que no pueden subsistir de los contribuyentes.

Así, pues, es imposible que los alcaldes desplacen los desechos a más de 100 kilómetros de distancia, y terminan despojándose de la basura en las montañas. Adicionalmente, los alcaldes tienen limitada la distribución de combustibles, porque el gasoil llega cada 15 días.

“Hay que decir que la disposición final de los desechos sólidos es de las gobernaciones”, destacó Andrade.