En un evento como de bárbaras naciones, una turba intentó tomarse violentamente el Palacio de Justicia como mecanismo de presión a la Corte Suprema de Justicia quien tiene en sus manos la elección del Fiscal General de la Nación.
Las funcionarios y magistrados estuvieron más de 5 horas atrapados en la sede del más alto tribunal, lo que causó una indignación generalizada ya que el llamado a las calles lo encabezó el propio presidente quien ante lo sucedido, trató de tomar distancia frente a la protesta cuando la cosa se salió de control.
Conversamos con Yesid Reyes, Exministro de Justicia y reconocido jurista, sobre los lamentables eventos del jueves 8 de febrero, sobre las consecuencias que puede tener y cómo la instrumentación de la protesta puede fácilmente salirse de control.