Las cartas están sobre la mesa y los venezolanos con toda su enorme sabiduría popular lo saben. El gobierno decidió que permanecerá en el poder por los siglos de los siglos, monarquía socialista amen, y la gran mayoría de la gente (80% a 20% según un ponderación de todas las encuestas realizadas en el país, incluida las oficialista), decidió el 22 de octubre 2023 (fecha de las primarias) que, no se los calaría más que, ya les dio 25 años de oportunidades, tiempo suficiente y los resultados, a los hechos nos remitimos, han sido desastroso, sí hay alguna duda, basta consultar la última encuesta Encovi-2023, o salir a cualquier barrio de caracas que entre fallas constantes de agua, electricidad, negocios cerrados, desempleo y mucha gente con agudos problemas de consumo (pelando en términos coloquiales), o millones de venezolanos deambulando por él mundo..
Para rematar el 3 de diciembre 2023, cuando el gobierno inventó el caramelo de cianuro de la recuperación del Esequibo, un anhelo histórico y sentido de todos los venezolanos. El pueblo que entendió la maniobra, la trampa caza bobos no salió a votar, los dejo solos, el romance de 25 años llegó a su fin, “ya no te acompaño más en tus locuras y desvaríos”, los centros se quedaron solos, vacíos de gente, la estructura del partido del gobierno, los militares atónitos cuidaban centros vacíos.
Van dos años sin aumentos de sueldos, recesión y default, el gobierno adelantó las elecciones para el 28 de julio 2024 porque sabe que los recursos son escasos que, se profundizaron las sanciones gane Joe Biden y/o gane Donald Trump, sí es Trump, la cúpula política del Psuv lo sabe, la cosa se pondrá más dura y la opción que se repita lo vivido a partir del 2014 amenaza incrementarse, regresa el período especial y a pesar que intentarán, hará lo imposible para continuar disfrutando de las mieles del poder, no lo lograran, tiene la derrota pintada en la frente.
Ofrece el gobierno que para el 1ero de Mayo 2024, “habrá grandes sorpresas” que, se producirá la explosión económica del país que, seremos, ahora sí, la 1era potencia del continente que, incluso estados unidos, tendrá que pedir cacao a Venezuela que por supuesto, habrá un gran incrementó de sueldos y salarios en dólares que, tendremos el salario mínimo más alto de América Latina que, los sueldos (ingresos) de todos los trabajadores públicos y privados aumentaran exponencialmente que, millardos de dólares (Gasto público), dinamizarán la economía venezolana que, por supuesto la inflación se mantendrá en un dígito. Pero los venezolanos ya no comen cuentos de caminos porque tienen acceso a múltiples informaciones vía las redes, al mundo digital, al internet y a la inteligencia artificial.
Los Venezolanos quieren recuperar su familia, la educación que, el país se incorpore a la comunidad económica internacional, aspiran que el petróleo, por el tiempo que le queda como motor de la economía no se quede sin uso en el subsuelo que, los múltiples recursos existentes y el enorme potencial del país pueda efectivamente desarrollarse, ya está claro para todos, según los pésimos resultados de los pasados 25 años que mientras ellos, el gobierno actual se mantenga en el poder no habrá ninguna posibilidad de bienestar, progreso y desarrollo, por eso el amplio rechazó y la decisión de votar masivamente contra ellos.
Intentarán todas las maniobras que sus torvas mentes puedan inventar, pero al momento de votar, en la soledad de la urna de votación, está decretada la derrota y el voto castigo será monumental. Sólo se podrán mantener el poder sí le dan una patada a la mesa y cierran la pequeña ventana electoral que por ahora está abierta, pero entonces la historia comenzará a ser otra.
El general Marcos Pérez Jiménez en el año 1957 cambió los resultados del plebiscito que él mismo había convocado y sus propios compañeros militares lo obligaron a irse un 23 de enero del año 1958. Evo Morales en el año 2019 intentó fraudulentamente mantenerse en el poder y tuvo que irse. En Colombia, Pablo Escobar ordenó el magnicidio de Luis Carlos Galán (18/08/1989) y su hijo de 17 años, Juan Manuel Galán en el momento del sepelio de su padre, le levantó la mano a César Gaviria y éste resultó electo presidente de Colombia (1990-1994). En cualquier variable el gobierno actual pierde las elecciones, puede dar un golpe de estado como hiciera Marcos Pérez Jiménez en el año 1952, al desconocer el triunfo de Jovito Villalba, pero el resultado siempre será el mismo, su tiempo se acabó, 25 años han sido suficiente. Venezuela ha dicho basta y cuando toque votar, el pueblo pasará su factura.
@angelcacique