Teale Kelley es una enfermera y madre soltera de 27 años que vive en Denver, Colorado. Recientemente, se convirtió en madre sustituta, no solo con la intención de poder dar a una pareja la emoción de tener a su bebé, sino de poder brindar una mejor calidad de vida a su propia hija pues, con el millonario pago que recibió, tuvo la oportunidad de comprar una casa.
Por El Tiempo
Según ha compartido a través de redes sociales, Teale llevaba tiempo considerando la idea de convertirse en madre sustituta. Por ello, decidió registrarse en una agencia de gestación subrogada que la contactó con la pareja y se encargó de todos los detalles legales y logísticos.
Sobre su decisión, compartió a medios estadounidenses, “me encanta poder retribuir y ayudar a los demás. Probablemente por eso elegí la enfermería como carrera”.
Su interés se hizo mayor debido a que trabaja en una clínica de fertilidad, por lo que constantemente se encuentra con parejas que tienen dificultades para poder concebir. Luego de haber atendido a una madre que sufrió cuatro abortos espontáneos, se convenció de que quería ayudar: “Fue en ese momento que entendí que podía ser una madre sustituta y ayudar a alguien a traer a su bebé a casa”.
En diciembre de 2023, finalmente dio a luz a un bebé. Dos meses después, tuvo la oportunidad de comprar una casa de cuatro dormitorios por un valor de US$500.000, misma que pudo costear gracias al pago de US$75.000 que recibió por dar a luz al hijo de otra persona, cifra que equivale a más de $293’500.000 pesos colombianos.
Ahora puede darle una mejor calidad de vida a su hija pues, pese a haber ahorrado durante años para comprar su propia casa, como madre soltera y trabajadora, no le era nada fácil poder hacerse de un inmueble en la zona de Mile High City, en donde los precios de las viviendas son elevados.
¿Cómo es ser madre sustituta?
La mujer de 27 años decidió documentar todo su proceso como madre sustituta a través de su cuenta de TikTok @Tealekelleyy, en donde incluso compartió cómo fue su búsqueda de una agencia, afirmando que entrevistó a diez diferentes antes de tomar una decisión.
Cuando finalmente firmó con la agencia de vientres subrogados, pasó por un proceso para encontrar a la familia que la elegiría para tener a su bebé. Con ellos desarrolló una amistad muy cercana, incluso, siguen en contacto y les envía su leche materna congelada a pesar de que viven fuera de Denver.
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