Casos de VPH en adolescentes, un problema de salud pública relegado por el chavismo

Casos de VPH en adolescentes, un problema de salud pública relegado por el chavismo

El servicio de urología del Hospital Central de Maturín sigue siendo uno de los de mayor demanda en el estado Monagas. Sin embargo, los adolescentes prefieren ir a consultas privadas cuando tienen alguna inquietud o presentan lesiones en los genitales. Foto: La Prensa de Monagas

 

El Virus de Papiloma Humano (VPH) es considerado un problema de salud pública al punto de que la Organización Mundial de la Salud (OMS) estableció un protocolo para crear una estrategia a partir del año 2020 con el objetivo de que un periodo de 10 años, la población adolescente esté vacunada contra esta enfermedad, debido al considerable aumento de casos entre los jóvenes.

Por: Jefferson Civira / Corresponsalía lapatilla.com





Venezuela, que desde hace varios años atraviesa por una crisis humanitaria compleja, no escapa de esta realidad, pero con el agravante de que en el sector público no se cuenta con las vacunas para su prevención. A esto se le suma las pocas o casi inexistentes campañas educativas en los liceos, así como también en los medios de comunicación y redes sociales.

Para la médico ginecobstetra, Francis Arreaza, quien labora en el Ambulatorio José María Vargas, ubicado en Los Guaritos de la ciudad de Maturín, estado Monagas, resulta alarmante el alto índice de casos detectados de VPH en jóvenes. Entre las principales causas está el inicio de relaciones sexuales a temprana edad, incluso, antes del primer sangrado menstrual en el caso de las niñas.

“Son cifras alarmantes porque hemos tenido evidencias y repunte de cáncer de cuello uterino a más temprana edad. Anteriormente, se hablaba de una población de entre 35 y 40 años, pero ya estos grupos etarios han disminuido. Los estudios han demostrado que esto está basado en el inicio precoz de las relaciones sexuales, pero también el número de parejas de estas adolescentes, que se convierten en pacientes promiscuas”, explica la especialista.

 

Los serotipos 16 y 18 del VPH en el caso de las mujeres, son la principal causa en la incidencia de cáncer de cuello uterino, que se ha convertido en el segundo más recurrente en el país después del cáncer de mama. Foto: Jefferson Civira

 

Añade que no solo se trata de las féminas, sino también de los varones que se contagian, ya que pueden presentar alteraciones, como ocurre con las mujeres. Este virus es capaz de producir lesiones benignas, que son conocidas como verrugas, y tienen la particularidad de que muchas veces son planas y otras son tipo crestas “como visualizar la parte superior de una coliflor, tal cual”.

Señala Arreaza que en muchos pacientes se han encontrado lesiones tipo crestas que pueden no solamente estar en el canal vaginal, sino que se pueden interiorizar. Se pueden observar a nivel de la boca, vulva, perineo e incluso del ano, dependiendo del tipo de relación sexual.

Agrega que esto también afecta al hombre, donde se pueden conseguir afectaciones en sus partes íntimas, tanto del pene como incluso del canal uretral, igualmente en la cavidad oral, faringe y orofaringe.

Estrategia de la OMS

 

Durante una jornada de implante de dispositivos intrauterinos (T de cobre) en el Ambulatorio José María Vargas de Maturín, jóvenes en su mayoría adolescentes esperando su turno. Foto: Cortesía

 

La ginecobstetra detalla que, con base a todo este panorama, la estrategia de la OMS se enfoca en aplicar la vacuna, lo que ha permitido la prevención de esta enfermedad en aquellos pacientes que no han iniciado actividad sexual. De esta manera, se crean anticuerpos antes de que aparezca el contacto con un agente infectante, lo que favorecerá la prevención a largo plazo de una lesión a nivel de cuello uterino o de vulva, que luego pueda tornarse en un tipo de cáncer.

Advierte la profesional de la Medicina que a veces con un solo contacto sexual con una persona que previamente esté infectada, se tiene de un 50 % a un 70 % de probabilidad de adquirir el virus. El organismo está en la capacidad de producir (por ser un virus) una reacción inmunológica que pueda detener su acción. En este caso, cada paciente puede ser expuesto a varios serotipos y de este virus ya se habla hasta de 200 serotipos.

“Se han clasificado en dos grupos: los que pueden producir cáncer y los que no. Hay algunos que producen lesiones verrugosas y otros que están altamente vinculados con la aparición de cáncer, sobre todo a nivel de cuello uterino”. Se dice que el 80 % de las personas a nivel mundial ha estado en contacto, en algún momento de su vida, con el VPH.

Tipos de vacunas

 

Especialistas señalan que cada vez es más alto el número de adolescentes que inician actividad sexual a más temprana edad, lo que aumenta también los casos de VPH debido a la falta de métodos de protección y vacunas. Foto: Cortesía

 

Actualmente, existen tres tipos de vacunas contra el VPH: la bivalente que actúa sobre dos tipos de virus, la tetravalente que ejerce sobre cuatro tipos de virus y la nonavalente que funciona en nueve.

En el caso de la bivalente, su particularidad básica es que ataca los virus que producen los condilomas (verrugas), que son el número 16 y 18, mientras que la tetravalente y la nonavalente actúan contra esos dos más otras cepas incluidas la 6 y 11. Vale mencionar que los serotipos 16 y 18 producen lesiones malignas en las personas infectadas.

Las ventajas de cualquiera de estas vacunas que se utilice es que va a cubrir los serotipos que producen las verrugas y los serotipos que mayormente producen cáncer de cuello uterino. Existen países en el mundo donde ya la vacuna tetra y nonavalente están incluidas en los programas públicos de salud, que son las que aplican en ambulatorios y hospitales.

En Venezuela, sin embargo, no se cuenta con esa incorporación de dichas vacunas en el sistema público de salud, a pesar de que se supone debe ser incluida en el plan de inmunización. Solo hay disponibilidad de vacunas comerciales, cuyo costo es elevado y la mayoría de la población venezolana no puede cubrir.

En las importantes cadenas de farmacias del país, el costo de la vacuna nonavalente alcanza los 200 dólares, mientras que la tetravalente se puede conseguir entre 60 y 100 dólares. Aunque esta última evidentemente es más económica, es más difícil de encontrar. No obstante, la bivalente también se consigue en menor costo.

Cáncer de cuello uterino

De acuerdo con el informe presentado por la Sociedad Anticancerosa de Venezuela en el año 2023, el cáncer de cuello uterino es la segunda causa de muerte en el país, solo superada por el cáncer de mama. Vale destacar que la ocurrencia de esta enfermedad se ha hallado en pacientes a partir de los 15 años de edad, tanto en la incidencia como en la mortalidad. El informe revela que en ambos casos se estima un aumento en las cifras.

“Lo que vemos hoy en día no es lo mismo que pasaba con nuestras abuelas, que a pesar de que se casaban a muy temprana edad, 14, 15 años, tenían cantidad de muchachos, pero había una diferencia: tenían una sola pareja sexual. Porque, incluso, era un tabú el hecho de separarse, de divorciarse. Actualmente, las niñas pueden incluso iniciar relaciones sexuales antes del desarrollo. Consigues que, en una historia clínica, la paciente de 15 años ya lleva 5, 6, 7 parejas sexuales, está expuesta a varios serotipos”, puntualiza la doctora Arreaza.

Para este reportaje, lapatilla.com intentó obtener cifras en la coordinación de infectología del Hospital Universitario Dr. Manuel Núñez Tovar, pero no fue posible conseguirlas. El jefe de este departamento indicó que tiene prohibido, por parte de la Dirección Regional de Salud del estado Monagas, ofrecer cualquier tipo de información a los medios de comunicación relacionada con las enfermedades de transmisión sexual en la entidad.

VPH en los hombres

 

Aunque el dispositivo intrauterino de cobre es seguro y eficaz para evitar temporalmente un embarazo, no libra de contraer una enfermedad de transmisión sexual, por lo que los médicos insisten en el uso de preservativos y que las vacunas contra el VPH sean incluidas en el sistema de inmunizacion en el país. Foto: Cortesía

 

En el caso de la población masculina, la incidencia del VPH también se ha incrementado, pero sin cifras oficiales, dada la opacidad del Gobierno venezolano que desde hace años dejó de publicar este tipo de información. No obstante, la preocupación de los especialistas en Urología es el aumento en los casos de cáncer de pene, que al menos en el estado Monagas, se ha convertido en la segunda causa después del cáncer de próstata.

El jefe del Servicio de Urología del Hospital Central de Maturín, Williams Vegas, explicó que tras un trabajo realizado en ese departamento y presentado el año pasado en el Congreso Nacional de Urología, llamó la atención los resultados obtenidos en Monagas. Mientras que en otros estados el cáncer de pene se ubica entre en tercero y cuarto más frecuente, en esta entidad es el segundo con mayor incidencia.

“Empezamos a investigar por qué estos resultados y básicamente puede ser por factores culturales. Los hombres como que les cuesta más consultar al médico, a pesar de que tú ves que en redes sociales, en televisión, en los periódicos, te dicen que todo hombre mayor de 40 años debe consultar al urólogo de forma estricta. Los hombres deben consultar al urólogo, incluso, cuando entran en la adolescencia”, enfatiza Vegas.

El también cirujano general expone que en la etapa de la adolescencia se debe ir al urólogo para que el especialista vea los cambios hormonales que llevan una expresión de los caracteres sexuales secundarios. “Vemos que el hombre consulta al médico cuando ya tiene un problema y no acude de forma preventiva, a pesar de que los genitales son externos y son fáciles de revisar, a diferencia de la mujer”, señaló con preocupación el especialista.

El médico urólogo coincide con su colega Francis Arreaza en que la mejor forma de prevenir el VPH es tener una vida sexual responsable y el mejor tratamiento es la prevención, es decir, el uso de preservativos, siempre por ser una barrera que puede evitar ciertos tipos de infección.

No menos importante es la vacunación, pero recordó que Venezuela y Cuba son los únicos países en Latinoamérica que no incluyen estas vacunas en el sistema de inmunización obligatoria.

A pesar de que en julio de 2023, el Ministerio de Salud anunció la incorporación de la vacuna contra el VPH al sistema público de salud, aún no se ha materializado. Precisó que son dos dosis que se deben aplicar, pero cada una se consigue en 260 dólares, que en este caso es la Gardasil 9 (nonavalente). “Lo ideal es ponerla entre los 9 y los 13 años de edad”, enfatiza.

Los últimos datos ofrecidos por el Programa de Infecciones de Transmisión Sexual en Monagas fueron en agosto de 2022, donde se indicaba que para ese entonces se habían detectado 73 casos de VPH, siendo en su mayoría pacientes de entre 20 y 30 años. Desde entonces, no ha sido posible obtener cifras actualizadas de esta y otras enfermedades de transmisión sexual, debido a la prohibición que pesa sobre los médicos encargados del tema.