Las bebidas energéticas se han vuelto cada vez más populares, pero eso no quiere decir que sean saludables o buenas para ti.
Por GQ
Si aún no encuentras la razón por la cual tu sueño se interrumpe noches seguidas, no quiere decir que sea por exceso de estrés, preocupación, ansiedad o precisamente porque padeces algún trastorno del sueño. Hay un factor mega importante que nunca debes olvidar: tu alimentación. Y no solo se refiere a la ingesta de alimentos sólidos, sino también de las bebidas, sobre todo aquellas que contienen ingredientes como la cafeína (el café como tal, los tés, las bebidas energizantes o hasta las deportivas). En fin, un sinnúmero de líquidos que, según tú, bebes para hidratarte debido a que el agua “no te sabe”, podrían ser la causa de tu desastroso y poco sueño.
La Sleep Foundation afirma que los expertos recomiendan, por lo pronto, evitar la cafeína por lo menos 8 horas antes de ir a la cama. Mientras que un café por la tarde, un té e incluso una bebida energética pueden aumentar el estado de alerta y combatir la somnolencia, el consumir cafeína demasiado tarde o de noche puede provocar problemas para conciliar y mantener el sueño a la hora de acostarse.
Un nuevo estudio encuentra que las bebidas energéticas se asocian a una calidad pobre del sueño y hasta insomnio
El estudio publicado en la revista científica BMJ Open, hecho por el equipo de trabajo de Siri Kaldenbach, que se dio a la tarea de investigar la asociación entre la frecuencia del consumo de bebidas energizantes y las características del sueño en 53,226 estudiantes universitarios y de posgrado noruegos entre los 18 y los 35 años, encontró que el consumo de estos líquidos tiene un efecto fuerte y determinante respecto a la mala calidad del sueño, incluso en pequeñas cantidades.